Ya van 92 días de guerra y la invasión todavía no se ha acabado. Ahora, los combates se han intensificado en la región del Donbás, mientras que ciudades como Járkov o Kyiv intentan volver a la normalidad. Con muchas comillas. El alcalde de la capital del país, Vitali Klichkó, ha dicho este jueves que su principal tarea desde que las fuerzas rusas fueron expulsadas de la capital es restablecer la seguridad e intentar que la ciudad vuelva a la normalidad. "Ahora intentamos volver a la vida normal, no es una tarea fácil", ha afirmado Klichkó, en una rueda de prensa que ha ofrecido a la reunión anual del Foro Económico de Davos.

En este sentido, ha expuesto que durante las semanas en que la capital estuvo objetivo de los ataques rusos murieron 120 personas, entre los cuales 4 niños y más de 300 resultaron heridas; más de 200 edificios de viviendas quedaron dañados y fueron destruidos una refinería cerca de Kyiv y centros logísticos para la distribución de alimentos. "Como alcalde intento que todo funcione tan bien como sea posible, está restablecida la electricidad, pero servicios como el transporte no funcionan tan bien como antes, pero el principal problema ahora es la seguridad", ha afirmado.

En medio de la conferencia de prensa, el alcalde puso un audio del móvil y estalló el sonido de las sirenas de alarma antiaérea. "Escuchamos esta alarma tres o cuatro veces al día", ha dicho. Klichkó se ha mostrado "orgulloso" de los soldados ucranianos que consiguieron expulsar las fuerzas rusas, y dijo que las localidades de Bucha, Borodyanka, Irpin y Gostomel, de la región de Kyiv, donde se produjeron matanzas de civiles, fueron una especie de escudo.

A la pregunta de cuánto costará la reconstrucción de las infraestructuras destruidas a Kyiv, el alcalde dijo que han calculado unos 80 millones de euros. "Agradecemos cualquier apoyo, inversión, ayuda, pero antes tenemos que detener la guerra", ha expuesto.

Un coste difícil de establecer

Hace unos días, un artículo del The Guardian calculaba que los daños a la infraestructura del país podrían suponer ya 4,27 mil millones de euros a la semana, a medida que las bombas destrozan miles de edificios y servicios públicos. Y claro está, kilómetros de carretera. Según las estimaciones de la Escuela de Economía de Kyiv (KSE) y validadas por el gobierno ucraniano, la cantidad de daños y desperfectos totales ya ha superado la cifra de 87.361 millones de euros desde que el presidente ruso, Vladímir Putin, decidió empezar la guerra en el país, el pasado 24 de febrero. Los académicos han dicho que la cifra aumentó en casi 4.273 millones a la semana hasta el 2 de mayo y han constatado que la estimación es seguramente más baja que el coste real porque las pérdidas de la guerra son difíciles de cuantificar.

Las pérdidas desde la invasión han aumentado en torno al 60% de la producción económica anual. En este sentido, los investigadores han constatado que Ucrania está sufriendo graves daños a la infraestructura, unos daños que serán complicados de reparar o reconstruir. El KSE ha dicho que su proyecto, Russia Will Pay, se ha basado en el análisis de miles de informes de daños causados durante la invasión que han sido presentados por ciudadanos, agencias gubernamentales y autoridades locales. Los informes y datos recopilados relacionan los daños causados en edificios, carreteras, fábricas y negocios por las bombas. De hecho, más de 33.000 metros cuadrados de edificios residenciales han estado abatidos por misiles, bombas y han sufrido daños durante la guerra. Más de 23.000 kilómetros de carreteras han sido destrozados o perforados por los bombardeos y casi 90.000 automóviles han sido destruidos.

 

Imagen principal: un hombre pasea cerca de la plaza Maidan donde hay un cartel que hace referencia a la guerra / Efe