Partidarios del expresidente Donald Trump han sido identificados como creadores de imágenes falsas generadas por inteligencia artificial que muestran ciudadanos afroamericanos que dan apoyo a Trump, según ha informado la misma BBC. Esta manipulación tiene un objetivo claro y es el de influir en los votantes negros, un grupo demográfico crucial en las próximas elecciones presidenciales de los Estados Unidos, a pesar de no tener vínculos directos con la campaña de Trump.

Una campaña de desinformación

Este dato es una muestra más de las estrategias de desinformación dirigidas en las elecciones de los Estados Unidos, que tendrán lugar el próximo 5 de noviembre. A diferencia del 2016, parece que estas falsificaciones de este año serían producidas desde dentro, un hecho que complica los esfuerzos para combatir la desinformación electoral. A medida que se acercan las elecciones, la lucha contra la desinformación es más intensa. El papel de las empresas tecnológicas, junto con la educación de los votantes será crucial para medir el impacto de campañas de fake news. La intención, tal como destaca un artículo del ABC, es influir en los resultados electorales de estas elecciones. Así, la lucha contra la desinformación es un desafío importantísimo en unas elecciones.

Una amenaza contra las elecciones

Un artículo del mes de enero de la NBC News ya alertaba de que la desinformación supondría una amenaza sin precedentes para la democracia de los Estados Unidos. A medida que se acercan las elecciones, los expertos advierten de una convergencia de acontecimientos en el país y también en el extranjero que hace que los peligros de la propaganda y las falsedades y conspiraciones sean más potentes que nunca.

Las investigaciones que destacaba el mismo portal constatan que hay un efecto directo sobre las opciones de votación, pero propagado por las élites políticas, especialmente entre los candidatos nacionales, puede afectar a la forma en cómo la gente toma las decisiones sobre determinados temas. Las soluciones que destaca el artículo para hacer frente a esta amenaza es la reactivación de las noticias locales, la creación de programas de alfabetización informacional y la aprobación de la legislación significativa en torno a las redes sociales, entre otros.

Casi tres años después del asalto al Capitolio de los Estados Unidos, las falsas teorías de conspiración electoral que impulsaron el violento ataque siguen prevaleciendo en las redes sociales. Los expertos advierten que probablemente la situación será peor en las próximas elecciones presidenciales. Las salvaguardias que intentaron contrarrestar las afirmaciones falsas la última vez se están erosionando, mientras que las herramientas y sistemas que las crean y difunden se expanden y se hacen mayores.