Los milagros, si se puede decir así de los rescates de personas de entre los escombros, suceden a Turquía. Este martes un equipo de rescate ha podido sacar de entre los escombros de un edificio en la ciudad Adiyaman un chico que llevaba la frívola cifra de 198 horas enterrado después del terremoto. Este, pero no es el primer rescate que se ha podido completar después de tantas horas bajo los escombros. El pasado domingo otro equipo de rescatistes también pudo rescatar a una mujer que hacía más de 150 horas que estaba atrapada bajo los escombros del edificio donde vivía y que colapsó durante el terremoto.

Respecto a las cifras de muertos más recientes, según informa la agencia turca de emergencias, a Afad, al menos 31.643 personas han muerto y otras 80.000 han resultado heridas en los terremotos de magnitud 7,7 y 7,6 que el lunes pasado devastaron el sureste de Turquía, y que han dejado también un mínimo de 3.575 muertos en Siria. Los nuevos datos llegan cuando todavía hoy se están localizando a víctimas con vida entre los escombros de los millares de edificios que se hundieron en las diez provincias más afectadas por el seísmo.

También ha circulado un vídeo que muestra cómo se vivió el momento del terremoto en un hospital turco, concretamente en la unidad de recién nacidos. En el vídeo se observa a las enfermeras y su rápida e instintiva reacción al notar cómo el suelo tiembla bajo sus pies. Todas van corrientes a la sala de incubadoras para asegurarse de que los bebés están seguros.

Siguen los rescates

Una mujer de 40 años ha podido ser localizada con vida después de 170 horas atrapada entre los escombros de una vivienda en la ciudad de Gaziantep, mientras que en Antakya, un hombre fue encontrado con vida. Ante estos rescates, algunos expertos han pedido que se vaya con cuidado con las labores de desescombro, tanto por la posibilidad de que haya supervivientes como para no dañar los cadáveres de las víctimas. Ahmet Ovgun Ercan, un prestigioso geofísico de la Universidad Técnica de Estambul, ha estimado en la red social Twitter que puede haber todavía 155.000 cadáveres entre los escombros.

En Siria, tanto el Gobierno como la organización de rescates tas cascos blancos, han dejado de actualizar sus balances de víctimas asiduamente. Otras fuentes citan cifras más elevadas, como el denominado Gobierno de Salvación, de la alianza islamista Organismo de Liberación del Levante, que controla buena parte de la provincia nordoccidental siria de Idlib, la último bastión opositora de Siria, y que asegura que en solo en sus zonas se han registrado más víctimas de las que los cascos blancos reportan para todas las áreas rebeldes.

Turquía sigue evacuando las zonas afectadas y deteniendo constructores

Las autoridades turcas han informado de que unas 158.000 personas han sido evacuadas a otras provincias. El incumplimiento de las normativas de construcción y las sucesivas amnistías dadas por el Gobierno en edificios levantados sin licencia explican el enorme número de víctimas mortales, según denuncia el Colegio de Arquitectos de Turquía. Por este motivo, se han llevado a cabo detenciones de grandes empresarios del sector de la construcción. El lunes se desplomaron miles de edificios en Turquía que teóricamente tendrían que haber aguantado un terremoto de 7,7 grados de magnitud. Conmocionados, los turcos han empezado ya a buscar culpables. Según la agencia estatal Anadolu, más de cien personas han sido detenidas en las diez provincias afectadas y el Ministerio de Justicia ha ordenado crear una unidad de investigación y el nombramiento de fiscales para perseguir constructores y otros responsables de edificios que no cumplían la normativa.