Duro revés para la canciller Angela Merkel en las elecciones federales de Alemania. El bloque conservador de la CDU ha ganado las elecciones pero con un importante retroceso, marcado por la irrupción de la formación de ultraderecha Alternativa para Alemania (AFD), que entra al Parlamento alemán como tercera fuerza. De esta manera, el partido conservador obtiene su peor resultado desde 1949.

Los dos principales partidos, que han gobernado en coalición los últimos años, han estado especialmente castigados en las urnas: el bipartidismo cae 13,6 puntos respecto de los últimos comicios de 2013. Según los datos difundidos por la Oficina electoral federal, todavía provisionales, la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel y su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) han obtenido un 33% de los votos, con una caída de 8,5 puntos con respecto a hace cuatro años. Por su parte, el Partido Socialdemócrata (SPD), liderado por Martin Schulz, cayó al 20,5%, más de cinco puntos por debajo de las anteriores generales y el peor resultado de la historia de la formación.

Schulz era el cuarto rival socialdemócrata que se enfrentaba en unas generales Merkel, que accedió al poder en el 2005 después de derrotar al entonces canciller Gerhard Schröder y después se impuso tanto en Frank-Walter Steinmeier, en el 2009, como Petar Steinbrück, el 2013.

​La participación en estas generales, según los datos de la Oficina electoral federal, se situó en el 76,2%, enfrente del 71,5% del 2013.

Irrupción de la extrema derecha

El partido ultraderechista AFD, que en los comicios de 2013 quedó fuera del Bundestag (cámara baja) en no conseguir por unas décimas el mínimo necesario del 5% de los sufragios, se hizo este domingo con el 12,6%. El Partido Liberal (FDP), formación tradicionalmente bisagra en Alemania que hace cuatro años tampoco llegó al listón exigido, vuelve a la cámara con el apoyo del 10,7%.

La Izquierda obtuvo un 9,2% de los votos, seis décimas más que el 2013, mientras que los Verdes consiguieron el 8,9%, medio punto más que los anteriores comicios.

Posibles acuerdos

El nuevo Bundestag contará con seis grupos parlamentarios y será por lo tanto el más diversificado con respecto al número de formaciones desde los años 50. Este hecho implica que un gobierno con mayoría parlamentaria exigiría la reedición de la gran coalición entre conservadores y socialdemócratas, pero que Schulz rechazó anoche; o la formación de un tripartito entre las filas de la canciller, los liberales y los verdes. Durante la campaña electoral todos los partidos han rechazado un acuerdo con los radicales de Alternativa para Alemania.