El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, se ha reunido hoy con los ministros del Interior de la UE y les ha pedido, tanto en privado como en público, que sus países reconozcan Palestina como un Estado independiente y que jueguen un papel político en el relanzamiento de las negociaciones de paz con Israel, porque considera que la UE es su socio más importante y un "verdadero amigo". En este sentido ha añadido que no hay ninguna contradicción entre reconocer Palestina y querer seguir con las negociaciones de paz. En cuanto al papel de la Unión en las negociaciones, Abbas ha declarado que tendría que estar por un solución justa.

Abbas también ha añadido que le gustaría que las resoluciones de la ONU no se quedaran en papel mojado y ha pedido su estricto cumplimiento, en relación a Israel. A la vez que ha instado a su país vecino a cumplir todos los acuerdos a los que han llegado, ya que se imposible que los tratados que han firmado se lleven a cabo si sólo se cumplen desde una sola parte del pacto. El presidente de la ANP ha subrayado que Palestina está "comprometida" a recuperar las negociaciones con Israel a pesar de los obstáculos, ya que es la única manera de conseguir la paz.

Por su parte, la Unión Europea ha reafirmado su plena voluntad de llegar a una solución firme, que pasa por la creación de dos Estados, Israel y Palestina, con una sola capital compartida, Jerusalén, según ha dicho este lunes la Alta Representante de la Política Exterior de la UE, Federica Mogherini. Quien también ha dicho que la posición de la UE es en base a los acuerdos de Oslo y las resoluciones de la ONU y ha afirmado que es la única "vía realista" por solucionar las aspiraciones de las dos partes. Mogherini también ha mostrado su rechazo hacia los asentamientos israelitas en territorio palestino, ya que son "completamente ilegales de acuerdo con el derecho internacional.

Por último, sobre un posible relanzamiento de las negociaciones de paz, Mogherini, ha explicitado que no serán creíbles sin la ayuda de los Estados Unidos, ya que aunque la Unión quiere tener un papel central en estas negociaciones no lo puede hacer sin la ayuda de otros países.