Francia y Alemania presionan Moscú para detener la guerra de Ucrania. El presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz, han urgido este sábado por teléfono su homólogo ruso, Vladímir Putin, para que inicie "cuanto antes mejor" una ronda de "negociaciones serias y directas" con Kyiv. Según el Elíseo, el presidente de Rusia se ha mostrado abierto a restablecer las conversaciones de paz con Volodímir Zelenski, que ya hace terso meses que se encuentran estancadas. En cuanto a la inminente crisis alimentaria provocada por la guerra, Putin ha expresado que el aumento del suministro de fertilizantes y productos agrícolas rusos ayudarían a rebajar las tensiones en el mercado de alimentos, pero que eso solo sería posible si occidente eliminara las sanciones económicas contra Moscú, y ha culpado sus "políticas económicas y financieras erróneas" por el desbarajuste a escala mundial. En el mismo tono, el líder del Kremlin ha alertado que el envío de más armas en Kyiv para ayudar a la resistencia ucraniana amenaza de soltar una "desestabilización de la situación y el empeoramiento de la crisis humanitaria" al país.
Paz
Macron y Scholz han instado este sábado al presidente ruso a negociar una solución a la guerra con Kyiv, "en el respeto a la soberanía y la integridad territorial de Ucrania". Fuentes del Elíseo, sede de la presidencia gala, han indicado que en la conversación telefónica a tres bandas, los dirigentes de Alemania y Francia han presionado para exigir un alto el fuego y para que Putin acepte negociar directamente con el presidente ucraniano "cuanto antes mejor". Además, el eje francoalemán ha pedido en Rusia la liberación de los 2.500 soldados de la acería de Azovstal que han sido hechos prisioneros de guerra por los rusos. Ante estas peticiones, el Elíseo asegura que Putin se ha mostrado dispuesta a reanudar las negociaciones con Ucrania, cuya primera ronda se celebró ahora hace exactamente tres meses, sin que las partes hayan conseguido llegar a ningún acuerdo desde entonces. El presidente ruso ha advertido además contra los envíos de armamento occidental en Ucrania. En la misma línea, el embajador ruso en los Estados Unidos ha tildado este sábado de "provocación" los planes de países occidentales como los EE. UU. o el Reino Unido para enviar los sistemas lanzacohetes múltiples (MLRS) que Kyiv tanto ha reclamado.
Crisis alimentaria
Los mandatarios han insistido también en la urgencia en levantar el bloqueo al puerto de Odesa para permitir la exportación de cereales ucranianos a través del mar Negro y evitar una crisis alimentaria a escala mundial. Según el Elíseo, Putin los ha prometido "encontrar vías" para exportar cereales, como acordar un acceso a los barcos en el puerto sin que estos sean operados militarmente por Rusia, siempre que primero se eliminen todas las minas de la zona. Berlín y París han prometido mantener un contacto estrecho sobre el riesgo de crisis y seguridad alimentaria. Al mismo tiempo, el jefe del Kremlin ha explicado "detalladamente" a los dirigentes alemán y francés las "verdaderas razones" de las dificultades con los suministros de alimentos: las "políticas económicas y financieras erróneas" de occidente y las sanciones impuestas por Occidente en Rusia, ha informado el Kremlin en una nota.