El actual presidente de Francia, Emmanuel Macron, que las encuestas lo dan como el preferido para ser reelegido en la segunda vuelta, ha aumentado el salario mínimo un 2,65%. Esta medida se implementará automáticamente a partir del 1 de mayo y comportará un aumento mensual de unos 34 euros netos al mes a todos los franceses. El ministerio de Trabajo ha anunciado esta medida para luchar contra la fuerte inflación registrada desde noviembre, y que se ha agravado por culpa de la crisis desembocada por la guerra de Ucrania. Con esta modificación, un trabajador a tiempo completo pasará a cobrar 1.645,58 euros brutos al mes, que por hora implica un ascenso de 10,57 a 10,85 euros.

Esta gran subida anunciada por el ejecutivo de Macron hace que la comparación con el Estado español sea devastadora. Entre los dos países vecinos y bisagra, España y Francia, hay una diferencia total de unos 645 euros. Esta gran diferencia es gracias, en parte, a qué el poder adquisitivo de los trabajadores franceses está protegido por un mecanismo de revalorización automático consagrado por ley, que garantiza que el salario mínimo aumente a la vez que la inflación que afecta a los hogares con los ingresos más bajos.

El poder adquisitivo es uno de los asuntos en que centrales de la campaña presidencial francesa, en particular en esta segunda vuelta. El presidente francés, Emmanuel Macron prometió este viernes subir en verano las pensiones un 4% para compensar el incremento de la inflación, que en marzo se situó en el 4,5%, y anunció que también se revalorizará el sueldo de los funcionarios. En una entrevista en la emisora France Info con ocasión de la campaña electoral para la segunda vuelta de las elecciones del 24 de abril, Macron explicó que si gana, en verano se procederá con este incremento del 4%, en lugar de esperar a enero, como es lo habitual Se trata de compensar "una inflación que aumenta mucho más que en los últimos años," aunque puso el acento que "en Francia sujetamos los precios mucho más que nuestros vecinos" y lo ejemplarizó con el hecho de que la inflación es de "casi el 10% en España".

Macron, a la segunda vuelta

La segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas el próximo 24 de abril será el mismo que en el 2017: un duelo entre el presidente liberal Emmanuel Macron y la candidata de la extrema derecha Marine Le Pen. Se ha llegado a este punto después de una noche electoral de infarto, el domingo pasado día 10 de abril, con un recuento que se alargó hasta bien entrada la madrugada. Pero las fuerzas con que llegan los dos presidenciables es muy diferente de la de hace cinco años. Entonces la distancia fue de 32 puntos. Hoy, las encuestas lo acortan hasta los cuatro: 51% contra 49%. La participación fue más baja que hace cinco años, pero finalmente más alta que la prevista por los sondeos.

Emmanuel Macron (La República En Marcha) ganó con el 27,4% de los votos, tres puntos más que hace cinco años y con más margen de lo que se podía pensar en los últimos días. Sin embargo, Marine Le Pen (Reagrupamiento Nacional) también creció dos puntos, hasta el 24,1%. Si se suman los votos de Eric Zemmour (Reconquista, 6,9%), la extrema derecha llegó casi a un tercio de las papeletas. O cosa que es lo mismo: uno de cada tres franceses. Más que los seis candidatos de la izquierda juntos.