El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha confirmado este jueves que volverá a presentarse como candidato a las elecciones de 2026, cuando ya habrá cumplido los 80 años. Desde Yakarta, donde se encuentra de gira diplomática antes de participar en la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), Lula ha asegurado que se encuentra “con la misma energía que tenía a los 30 años” y ha anunciado que “disputará un cuarto mandato” como jefe de Estado brasileño. Las elecciones están previstas para el 4 de octubre de 2026, y, según los sondeos actuales, el líder del Partido de los Trabajadores ganaría ante varios posibles rivales conservadores, aún por determinar. En una comparecencia conjunta con el presidente de Indonesia, Prabowo Subianto, en el Palacio de Merdeka, Lula ha aprovechado también para criticar las políticas comerciales proteccionistas de Estados Unidos y no ha descartado un encuentro con Donald Trump durante la cumbre.
Lula ha asegurado que durante su hipotético cuarto mandato al frente de Brasil continuaría fomentando el multilateralismo y la “democracia comercial”, la cual serviría para crecer y crear puestos de trabajo de calidad. “Por eso fuimos elegidos, para representar a nuestra gente”, ha dicho ante el presidente de Indonesia. “Hay que cambiar cosas. El siglo XXI nos exige que tengamos el coraje que no tuvimos en el XX. Exige que cambiemos algunas de las formas que tenemos de relacionarnos comercialmente para no ser dependientes de nadie”, ha explicado.
Se confirma el giro
La confirmación de que Lula será presidenciable en las elecciones de 2026 confirma una tendencia que se ha ido evidenciando en los últimos años. Antes de celebrarse los anteriores comicios presidenciales, en el año 2022, Lula aseguró que sería la última campaña electoral que protagonizaría. El entonces rival de Jair Bolsonaro se justificaba con el tema de su edad avanzada y por la creencia de que el país necesitaba una renovación política. Una vez fue investido por tercera vez, Lula empezó a insinuar que se podría proponer nuevamente como elegible para la presidencia del país. Más tarde, en febrero de 2023, declaró que se podría presentar a la reelección en 2026, dejando la decisión en función del contexto político del país y de su salud.
Figura dominante en la izquierda de Brasil, Lula es el presidente con la carrera más longeva desde la vuelta a la democracia hace 40 años. De la misma manera que pasó con Joe Biden durante el final de su mandato como presidente de los Estados Unidos, algunos políticos brasileños han expresado preocupación por la edad de Lula y los problemas de salud recientes. El jefe de Estado brasileño pasó por una operación de urgencia a causa de una hemorragia cerebral después de una caída. Ahora bien, Lula es insistente a la hora de demostrar que se encuentra en un buen estado de salud, cosa que comparte habitualmente en las redes sociales.