La Comisión Europea (CE) ha propuesto este miércoles una serie de medidas para hacer frente a la crisis migratoria que vive el bloque comunitario en la frontera con Bielorrusia. Entre otras propuestas, Bruselas estudia implementar un procedimiento de excepción en el derecho europeo e internacional que permitiría reanimar a los solicitantes de asilo de manera exprés. A efectos prácticos, las medidas sugeridas por la comisaria europea del Interior, Ylva Johansson, sirven para que la UE pueda mantener a los refugiados cerrados durante más tiempo mientras consideran sus solicitudes. Durante este tiempo, no se considerará que los solicitantes de asilo hayan entrado en territorio europeo, tal como ya se hace en los aeropuertos. En estos 'limbos migratorios', la UE podrá devolver a las personas migradas desde la frontera de acuerdo con el marco legal.
"Emergencia"
La CE quiere invocar por primera vez una cláusula en la ley europea que permite introducir cambios en la política de acogimiento únicamente en "situaciones de emergencia". A pesar de haber reconocido este miércoles que la situación en las fronteras "va a menos", Bruselas ha argumentado que "no pueden rebajar a la guardia" con el líder bielorruso, Alexandr Lukashenko. Es así como ha querido justificar el bloque comunitario el paquete de medidas que han propuesto para remediar la crisis. Concretamente, las medidas incluyen un procedimiento de gestión de asilo y migración de emergencia en las fronteras exteriores que permitirán a las autoridades de Polonia, Lituania y Letonia ampliar el periodo de registro para las solicitudes de asilo a 4 semanas, en lugar de los actuales 3 a 10 días. Además, también podrán aplicar el procedimiento de asilo en la frontera para procesar todas las solicitudes, incluidos los recursos, en un plazo máximo de 16 semanas, excepto en el caso de personas que sufran problemas de salud particulares. El lugar en la frontera donde se retendrá en los migrantes durante este tiempo no será considerado territorio de la UE, lo que significa que podrán ser devueltos rápidamente desde la misma frontera sin ser trasladados.
Migrantes hacen cola para utilizar las duchas en la frontera entre Bielorrusia y Polonia / Efe
"Marco legal más flexible"
De estos tejemanejes legales para evitar que los refugiados entren en la Europa continental, el vicepresidente comunitario Margaritis Schinas lo ha llamado garantizar "un marco legal más flexible" para abordar la crisis migratoria. Schinas ha asegurado que las medidas se hacen en el marco del derecho europeo e internacional (respetando los derechos de los migrantes a solicitar asilo y no hacer devoluciones en caliente ni en grupo). En principio las medidas se aplicarán por un periodo de 6 meses, que podrá ser prorrogado o derogado, a los ciudadanos de terceros países que después de haber entrado irregularmente a la UE desde Bielorrusia se encuentren en las proximidades de la frontera o aquellos que se presenten en los pasos fronterizos. La propuesta, sobre la cual se consultará en la Eurocámara, tendrá que ser adoptada por el Consejo (países de la UE) para poder entrar en vigor.
La Unión Europea ha acusado repetidamente al líder populista Lukashenko de atraer refugiados (la mayoría kurdos, afganos e iraquíes) en las fronteras con la UE con el fin de desestabilizar el bloque como represalia por haber impuesto sanciones contra Bielorrusia. Actualmente, miles de familias esperan, con temperaturas bajo cero, poder atravesar la frontera.
Foto principal: una familia de refugiados en la frontera con Bielorrusia / Efe