El estado de salud y las capacidades cognitivas del octogenario expresidente de los Estados Unidos Joe Biden fue uno de los temas candentes de la campaña de las elecciones presidenciales norteamericanas de noviembre de 2024. Ante los diversos lapsus que había mostrado a lo largo de su mandato, los críticos externos lo usaron como arma contra su candidatura, si bien el Partido Demócrata se convirtió en una olla a presión en su contra después de que el entonces presidente mostrara visibles dificultades para desempeñarse con fluidez en los debates contra su rival, Donald Trump. Con las encuestas augurando un porvenir complicado, finalmente todo estalló y le sucedió como cabeza de la candidatura demócrata su vicepresidenta, Kamala Harris, si bien con poco éxito.
Ahora, dos periodistas con experiencia en Washington van a publicar un libro sobre el deterioro cognitivo de Joe Biden durante sus últimos días como presidente de Estados Unidos, ya con 82 años. El volumen, titulado 'Pecado original: el declive del presidente Biden, su encubrimiento y su desastrosa decisión de volver a presentarse', ha sido escrito por el corresponsal jefe de la CNN en Washington, Jake Tapper, y el corresponsal político de Axios Alex Thompson. Está basado en entrevistas realizadas con más de 200 personas cercanas a Joe Biden y saldrá a la venta el 20 de mayo.
Un adelanto del libro, avanzado este martes por la revista The New Yorker, da pistas sobre el estado de Biden con un seguido de anécdotas y revelaciones. En la obra se afirma que "lo que el público vio de su desempeño fue preocupante", pero que "lo que sucedía en privado era peor". "Si bien Biden, día tras día, podía tomar decisiones, demostrar sabiduría y actuar como presidente, hubo varios problemas importantes que complicaron su presidencia", se relata en el extracto.
Por ejemplo, al final de su mandato, tras diversos tropiezos en actos públicos —además de la edad, Biden sufrió una fractura de pie en 2020 que le complicó la estabilidad y también padecía un problema en la columna—, su doctor personal, Kevin O'Connor, advirtió que de sufrir una mala caída, el entonces presidente podría haber requerido una silla de ruedas, como había llevado Franklin D. Roosevelt durante su mandato. Por ello, sus asesores diseñaron un plan para prevenir una caída: barandillas reforzadas, calzado deportivo o pasillos cortos para subir a escenarios. O'Connor habría bromeado de hecho con los asesores de Biden sobre que estaban intentando matarlo, mientras que él intentaba mantenerlo con vida.
Los periodistas hablan, además, de "un número limitado de horas en las que podía funcionar de manera fiable y un número cada vez mayor de momentos en los que parecía bloquearse, perder el hilo de sus pensamientos, olvidar los nombres de sus principales asesores o, momentáneamente, no recordar a amigos que conocía desde hacía décadas". Un ejemplo de esto tuvo lugar el 15 de junio de 2024, escriben los autores, en un acto para recaudar fondos celebrado en Los Ángeles y en el que participaron los actores George Clooney y Julia Roberts, conocidos simpatizantes del Partido Demócrata a los que conocía de hacía tiempo.
"Lento de reacción y casi catatónico"
"Biden apareció cojeando por una esquina. Clooney sabía que el presidente acababa de llegar de la cumbre de líderes del G-7 en Apulia, Italia, esa mañana y podría estar cansado, pero, ¡caramba!, no se esperaba esto. El presidente parecía muy disminuido, como si hubiera envejecido una década desde la última vez que Clooney lo había visto, en diciembre de 2022. Daba pasitos cortos, y un asistente parecía guiarlo del brazo", narra el texto. Tras acercarse a Clooney y despacharle hasta en dos ocasiones con el "gracias por venir" que le estaba dedicando al resto de asistentes a los que no conocía, el ayudante que iba con él tuvo que hacer énfasis en que se trataba de Clooney. "¡Ah, sí! ¡Hola George!", respondió finalmente Biden, según el libro.
El evento, en el que otros asistentes aseguraron que Biden se mostró "lento de reacción y casi catatónico", fue, junto con la pobre actuación de expresidente en el debate con Trump el 27 de junio, crucial para que George Clooney escribiera la famosa columna de opinión que el The New York Times publicó poco después, el 10 de julio, pidiendo un nuevo candidato para el Partido Demócrata. Biden depuso finalmente su candidatura a las presidenciales de noviembre el 21 de julio, dando paso a su vicepresidenta, Kamala Harris, que perdió los comicios de noviembre ante Trump.