Después de que la nueva carrera espacial de nuestros tiempos se centre en billonarios aburridos puede quedar en uno según plano el trabajo en que hacen a las agencias espaciales como la NASA para seguir descubriendo el espacio. La organización norteamericana lo tiene claro: enviarán a las primeras personas a Marte en la próxima década. Pero para alcanzar este hito hay que ir preparado y por eso la NASA está reclutando voluntarios que vivirán en condiciones parecidas a las que tendrían que soportar los astronautas que vayan en el planeta vecino durante un año.

La agencia espacial americana ha denominado en esta empresa como Crew Health and Performance Exploration Analog. El proyecto incluye hasta tres simulaciones de superficie de Marte de un año basadas en el Johnson Space Center de la NASA. Según ha expuesto en un comunicado la agencia, los voluntarios "darán apoyo a la investigación para desarrollar métodos y tecnologías para prevenir y resolver posibles problemas en futuras misiones de vuelos espaciales humanos en la Luna y Marte".

El papel de los análogos

Las personas que pasarán por este experimento para simular el impacto de las condiciones del planeta encarnado sobre el cuerpo y la tarea de los futuros astronautas son conocidos como análogos. "El análogo es fundamental para probar soluciones para satisfacer las complejas necesidades de vivir a la superficie marciana", dijo Grace Douglas, científica principal de la investigación de la tecnología avanzada de alimentos de la NASA en el Johnson Space Center de la NASA en Houston. "Las simulaciones a la Tierra nos ayudarán a comprender y combatir los desafíos físicos y mentales que tendrán que afrontar los astronautas antes de marcharse".

Las misiones que llevarán a cabo los voluntarios estarán formadas por cuatro miembros de la tripulación y trabajarán en una superficie de más de 500 metros cuadrados imprimida en 3D, la cual simula el hábitat de Marte. El espacio emulará todos los aspectos del planeta vecino, incluyendo limitaciones de recursos, fallos del equipo, retrasos en la comunicación y otros factores estresantes ambientales.

Los voluntarios tendrán que hacer tareas como paseos espaciales, investigación científica, uso de la realidad virtual y controles robóticos e intercambio de comunicaciones. La NASA considera que los resultados proporcionarán datos científicos importantes para validar sistemas y desarrollar soluciones a posibles problemas que tengan las personas que acaben metiendo un pie en Marte.

¿Quién puede ser candidato?

La vida en el planeta encarnado no es para todo el mundo. Por eso, la NASA busca ciudadanos "norteamericanos sanos o motivados". También quieren que los candidatos "no sean fumadores, de 30 a 55 años y que sean competentes en inglés para una comunicación eficaz entre la tripulación y el control de la misión."

Los requisitos no acaban aquí. Habrá que tener un máster en un campo de las STEM (ingeniería, las matemáticas o la ciencia biológica, física o informática). La titulación tiene que ser de una institución acreditada y el candidato tiene que contar con al menos dos años de experiencia profesional el campo de las STEM o un mínimo de mil horas pilotando un avión.

Además, los voluntarios que tengan un doctorado, más experiencia de la pedida, formación en medicina o formación militar tienen más puntos por acabar en esta simulación.

La selección de la tripulación seguirá los criterios estándar de la NASA para escoger astronautas y el proyecto está previsto que empiece durando el otoño del 2022.

 

Imagen principal: Astronautas de la NASA antes de una misión (Fotografía de Archivo) / Europa Press