El presidente israelí, Isaac Herzog, ha hecho este miércoles un llamamiento al mantenimiento y el impulso del frágil alto el fuego en Gaza como paso necesario para llevar “esperanza a la región, para Israel, para los palestinos y para nuestros vecinos”. Las declaraciones han tenido lugar tras una reunión en Jerusalén con el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, en una visita oficial de dos días a Israel.

En un comunicado emitido por su oficina, Herzog ha remarcado la importancia de seguir avanzando hacia la siguiente fase del acuerdo de paz iniciado la semana pasada y ha expresado su agradecimiento al presidente Donald Trump, destacando su papel clave en el apoyo a la tregua. “Estamos agradecidos al presidente Donald Trump por su firme insistencia en avanzar el alto el fuego. Tenemos que avanzar. Tenemos que ofrecer esperanza a la región, por Israel, por los palestinos, nuestros vecinos y el futuro de nuestros hijos”, ha declarado.

Repatriación de cadáveres y rehenes

Uno de los puntos centrales del discurso de Herzog ha sido la situación de los rehenes israelíes. Todavía hay al menos trece cuerpos de rehenes en manos de Hamás y otras milicias gazatíes. En los últimos días, estos grupos han ido entregando los cadáveres de otras quince víctimas de forma escalonada, alegando que, en el momento del inicio del cese de hostilidades, no tenían acceso a los cuerpos.

“Como primer paso, evidentemente, insistimos en que queremos ver a todos nuestros rehenes devueltos para que puedan recibir un entierro digno”, ha afirmado Herzog, visiblemente emocionado por la situación de las familias afectadas.

Vance apuesta por avanzar hacia la fase siguiente

Por su parte, el vicepresidente J.D. Vance ha insistido en la importancia de asegurar la continuidad de la tregua y hacer avanzar el proceso negociador hacia las siguientes fases pactadas. “Estamos aquí para hablar de cómo garantizar que el acuerdo de paz que comenzó la semana pasada se mantiene, y cómo hacer que avancemos a la fase dos, a la fase tres, con éxito”, ha afirmado.

A pesar de mostrarse optimista por el futuro de la región, Vance no ha hecho ninguna mención directa a los palestinos en sus declaraciones. Ha destacado, en cambio, su voluntad de crear un entorno más estable en Oriente Próximo donde, según él, los “amigos del Golfo” y los “amigos israelíes” puedan construir conjuntamente “un Oriente Medio mejor para todos”. “Creemos que esto es en el interés de Estados Unidos, pero también es en el interés de todos los que viven aquí”, ha añadido.

Visita con trasfondo político

La visita de Vance ha estado acompañada por figuras cercanas a Donald Trump, como Steve Witkoff, enviado especial de la Casa Blanca para Oriente Medio, y Jared Kushner, yerno del expresidente y antiguo asesor en asuntos internacionales durante su administración. La presencia de Kushner vuelve a situar a Trump en el centro de la diplomacia regional y refuerza su imagen como actor clave en el futuro de la tregua en Gaza. Con este movimiento diplomático, tanto Israel como Estados Unidos exploran vías para consolidar una paz aún incierta, pero que podría ser decisiva para el futuro de la región.