El Gobierno israelí ha aprobado este domingo que Noruega gestione los fondos que el Estado sionista recauda en nombre de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y después entrega, de forma que el país nórdico retendrá este dinero —congelado desde noviembre a causa de la negativa de Israel a entregarlos por la guerra a Gaza— y los transferirá a la entidad palestina que gobierna sobre territorio de Cisjordania. Eso sí, solo si Israel da permiso previo. Otra condición del gobierno de Netanyahu es que ninguna parte de estos fondos pueden llegar a la Franja de Gaza, en donde Israel mantiene la ofensiva militar a gran escala contra el grupo islamista Hamás: solo para Cisjordania. La Autoridad Palestina que preside Mahmud Abbas, por su parte, ha mostrado su rechazo a recibir el importe en tales condiciones.
En noviembre, el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, bloqueó una parte de los fondos que se entregan mensualmente al ANP en concepto de impuestos que Israel recolecta en su representación, para evitar que este dinero fuera hacia Gaza para pagar a empleados que la Autoridad Palestina todavía tiene en nómina, supuestamente por el peligro de que acabaran en manos de Hamás. Por su parte, la Autoridad Palestina rechazó recibir la totalidad de los fondos como medida de protesta, unos 275 millones de shékeles por mes (unos 67 millones de euros), si estos no incluían la parte correspondiente para pagar a sus trabajadores de la Franja, lo cual agravó la crisis económica que sufren las autoridades palestinas, sin recursos suficientes para cubrir los sueldos de sus 150.000 empleados.
En la Cisjordania ocupada —con gobierno de la Autoridad Palestina en zonas reducidas— eso implica que no se pueda pagar o solo se cubra parcialmente los salarios de funcionarios, maestros en escuelas o personal médico en hospitales públicos, así como miembros de las fuerzas de seguridad, cosa que preocupaba a Estados Unidos, que ha insistido a Israel en la transferencia de los fondos durante los últimos meses. Con lo estipulado por Israel en este momento, la Autoridad Palestina solo podría obtener los fondos correspondientes a Cisjordania, donde la crisis económica desde el inicio de la guerra de Gaza se percibe también por el aumento exponencial del desempleo, que pasó del 16 o 17% a casi el 40% a causa de los 150.000 trabajadores palestinos que estaban empleados en Israel o sus colonias y ahora no trabajan. Estos eran en torno al 20% de la fuerza laboral cisjordana.
Si llega dinero a Gaza, se corta el grifo
De acuerdo con la decisión tomada hoy en la reunión dominical del gabinete ministerial, la aprobación de transferencia de fondo implica que estos se queden a manos de "un tercer país", Noruega, y que si tienen que ser enviados a la Autoridad Palestina sea solo con el visto bueno israelí, que antes tendrá que asegurarse de que la parte correspondiente a Gaza no es enviada, según ha informado la Oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. Desde que estalló la guerra, eso forma parte de la política de presión de Israel en Gaza para derrotar en el grupo islamista Hamás, autores de los atentados terroristas sobre población israelí el pasado 7 de octubre y que mantiene todavía al menos a un centenar de rehenes.
"EE.UU. y Noruega respetan la decisión del gabinete político y de seguridad, que ha ordenado detener el traslado de fondo de Gaza," y el dinero que quede en manos de Oslo para enviarse a la Autoridad Palestina "no será transferido bajo ninguna circunstancia bajo la aprobación del ministro de finanzas de Israel", ha anunciado la oficina de Netanyahu. "Cualquier violación del acuerdo permite" a Israel "congelar inmediatamente todos los fondos" para los palestinos, ha agregado.
Rechazo de las autoridades palestinas
Delante del anuncio del plan, el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Husein en el Sheij, lo ha criticado y ha asegurado que las autoridades palestinas no aceptarán tal medida. "Rechazamos cualquier suspensión de nuestros derechos financieros o cualquier condición impuesta por Israel que se base en impedir que la Autoridad Palestina pague a nuestro pueblo en la Franja de Gaza", ha afirmado Al Sheij, en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias palestina, Wafa. El cargo palestino ha instado a la comunidad internacional "a detener este comportamiento basado en la piratería y el robo del dinero del pueblo palestino", y ha apelado a "obligar a Israel a transferir todo el dinero".