El Gobierno israelí encabezado por Benjamin Netanyahu ha decidido este domingo por unanimidad cerrar la emisión del canal Al Jazeera, de origen catarí, en todo el territorio de Israel, después de que el Parlamento aprobara el mes pasado una ley que permite el cierre de medios extranjeros bajo el pretexto de mantener "la seguridad del Estado". "El Gobierno que encabezo ha decidido de manera unánime: el canal de incitación Al Jazeera se cerrará en Israel", ha anunciado en su cuenta de la red social 'X' el primer ministro Netanyahu, sin dar más detalles sobre cuándo tendrá efecto la decisión. En su mensaje, Netanyahu ha aprovechado para dar las gracias al ministro de Comunicación israelí, Shlomo Karhi, que impulsó la norma que permite al Ejecutivo clausurar la emisión nacional de la cadena con origen en Qatar, una de las principales fuentes de información que han dado a conocer el día a día de la ofensiva militar que Israel mantiene sobre la Franja de Gaza, por la gran cantidad de periodistas que el canal televisivo mantiene dentro del enclave palestino.

La conocida como a 'Ley Al Jazeera' otorga al ministro de Comunicaciones de Israel el poder de ordenar a los proveedores de contenidos, por un plazo renovable de 45 días, el fin de su retransmisión desde el país, además del cierre de sus oficinas, la incautación de sus equipos y el bloqueo del servidor de su página web. Según detalla el proyecto de ley, la orden para cerrar un canal de noticias extranjero tiene que presentarse a revisión judicial en un tribunal de distrito, que tiene que decidir en 72 horas si desea modificar o acortar el periodo de cierre.

Al Jazeera, de origen catarí, ha informado de primera mano de la ofensiva israelí sobre Gaza

Al Jazeera es uno de los canales con mayor despliegue y periodistas en la Franja y desde octubre ha informado sobre bombardeos de hospitales, ataques contra edificios residenciales y campos de refugiados y la muerte de civiles gazatíes, lo que, según denuncian países no alineados como Sudáfrica e investiga ahora la Corte Penal Internacional de La Haya, podrían ser constitutivos de crímenes de guerra. Además, periodistas del canal catarí, como Hamza Wael Dahdouh o Mustafa Thuria, han perdido la vida en bombardeos israelíes. Otros corresponsales como Wael Dahdouh han visto morir a la mayoría de sus familiares, incluido su hijo primogénito y también reportero, Hamza Dahdouh. Conseguir información de primera mano sobre lo que está sucediendo dentro de la Franja de Gaza resulta ya difícil, por el hecho de que Israel impide la entrada de la prensa internacional en el devastado enclave palestino, donde la ofensiva militar de su ejército ya ha dejado a más de 33.000 personas muertas.

La 'Ley Al Jazeera' fue aprobada el pasado 2 de abril, y permite bloquear de manera temporal la retransmisión en Israel de cualquier medio extranjero que "dañe la seguridad del Estado". La Asociación de Prensa Extranjera (FPA) de Israel, que representa a los periodistas que cubren el país y los territorios palestinos para medios extranjeros, calificó entonces la decisión de "intento descarado de silenciar a los medios", y alertó que sienta un precedente peligroso de que podría llevar al cierre de más medios extranjeros. También la Casa Blanca, aliados incondicionales de Israel, se pronunció sobre esta ley a principios de abril, considerándola una medida "preocupante".