Israel ha vuelto a atacar instalaciones en el Irán en la madrugada de este miércoles, intensificando todavía más la tensión en el Oriente Próximo. Según fuentes oficiales, los objetivos de esta nueva ofensiva han sido infraestructuras clave para el programa nuclear iraní, incluyendo una centrífuga utilizada para enriquecer uranio y varias fábricas de misiles. El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) ha confirmado que al menos dos instalaciones, una en Teherán y otra en Karaj, han sufrido daños.
➕ ¿Irán estaba a punto de desarrollar un arma nuclear?
➕ Trump exige la rendición de Irán mientras Israel intensifica los bombardeos sobre Teherán
Esta nueva ofensiva llega en un contexto especialmente tenso, después de que trascendiera la posibilidad de que el expresidente norteamericano, Donald Trump, considere participar directamente en el conflicto al lado de Israel. Esta opción ha encendido las alarmas en Irán, que ha advertido que no permanecerá pasivo si los Estados Unidos entran en acción militar.
El embajador iraní en la ONU, Ali Bahreini, ha lanzado un duro mensaje este miércoles desde la sede de las Naciones Unidas a Ginebra. Bahreini ha afirmado que, si su gobierno concluye que los EE.UU. están implicados directamente en los ataques, responderán también de manera directa contra los norteamericanos. En su discurso, ha tildado Israel de "mal absoluto" y "Estado genocida", asegurando que hace más 70 años que muestra en el mundo "sus talentos más siniestros". Asimismo, ha criticado duramente el silencio de la comunidad internacional, especialmente de los países occidentales que se consideran defensores de los derechos humanos, ante los ataques israelíes, recoge la Cadena SER.
Irán responderá sin piedad a los ataques
Poco antes, el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, había publicado un mensaje en la red social X advirtiendo que Irán respondería "sin piedad" a los ataques israelíes, dejando claro que el régimen no piensa ceder delante de la presión militar.
➕ La revolución iraní bajo presión: Khamenei afronta su reto más difícil
Por su parte, el gobierno israelí mantiene un discurso claramente belicista. El ministro de Defensa, Israel Katz, ha asegurado a través de las redes sociales que Irán está viviendo "los momentos previos a la caída de una dictadura", apuntando así a un posible objetivo de cambio de régimen. Las autoridades israelíes justifican su acción militar argumentando que el programa de enriquecimiento de uranio de Irán no es para usos civiles, sino que tiene como objetivo el desarrollo de armas nucleares, ya que los niveles de enriquecimiento actuales exceden los requeridos para finalidades energéticas.
En paralelo al conflicto, Irán ha mostrado por primera vez imágenes de un dron israelí abatido, hecho que quiere demostrar su capacidad defensiva. Al mismo tiempo, el ejército israelí ha informado de que ha interceptado al menos siete proyectiles lanzados desde territorio iraní.
➕ El presidente de Irán hace un llamamiento al pueblo iraní a luchar unido contra Israel
Este intercambio de hostilidades evidencia un peligroso escenario de escalada militar que amenaza con implicar actores internacionales de primer nivel, como los Estados Unidos. Con una retórica cada vez más agresiva y una falta de voluntad aparente por parte de las dos partes para establecer diálogo, el conflicto entre Israel e Irán puede derivar en una guerra abierta con consecuencias imprevisibles para la región y para la estabilidad global.