Francia ha empezado a buscar un sustituto para el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, que no convoca elecciones desde el 2006 y ya tiene 87 años, según ha informado el diario Le Figaro, bien conectado con el Elíseo. Francia sigue teniendo influencia en el Oriente Próximo y el presidente Emmanuel Macron quiere utilizarla para encontrar una solución el máximo de consensuada en el laberinto político de la zona. Los franceses temen que Abbas pueda acabar desapareciendo y la situación se complique todavía más. De hecho, si no convoca elecciones es por el temor de perder los comicios ante el grupo integrista Hamás, según indican las encuestas. Hamás controla actualmente la Franja de Gaza y aspira a hacer lo mismo en Cisjordania (Judea y Samaria para los judíos).

Según Le Figaro, Macron ha pedido a todo el equipo diplomático que le presenten dos nombres de personas que puedan relevar en el futuro al presidente de la Autoridad Palestina. Los que tendrán que presentar dos nombres cada uno son 5 excónsules de Francia en Jerusalén y el actual (que se encargan de relaciones con los árabes), los 5 exembajadores en Tel-Aviv y el actual, y los 5 expatrones y el actual de los servicios de información exterior (DGSE). Con estos nombres, Francia intentará consensuar una opción que sea aceptable para los palestinos, y aceptable para la comunidad internacional.

Mahmoud Abbas había prometido convocar elecciones en mayo del 2021, pero al final las suspendió de forma indefinida, y eso provocó una fuerte tensión con Hamás. Oficialmente, el presidente de la Autoridad Palestina culpó de la suspensión a Israel, por las dificultades en votar en Jerusalem Est. Pero está claro que la decisión se tiene que ir a buscar en la política interna. A la no convocatoria de elecciones desde el 2006, pronto hará 20 años, se sumó en el 2018 la decisión de disolver el Consejo Legislativo, con lo que Abbas ha ido monopolizando el poder mientras en el área crecía el islamismo.

En teoría las diferentes facciones palestinas se reunieron en Argelia el 13 de octubre pasado, y acordaron celebrar elecciones legislativas y presidenciales en el plazo de un año. Pero no está claro que eso se materialice ni quién lo puede liderar.

Abbas tiene el apoyo de los seguidores de Fatah, el partido de Yásser Arafat, pero tiene dificultades para controlar el territorio en los puntos más calientes de Cisjordania, como Yenin, Nablus o Hebrón, dónde en algunos barrios tienen implantación milicias armadas.