Francia ya se está preparando para el plan Marshall para la reconstrucción de Ucrania, que se pondrá en marcha tan pronto como finalice la guerra provocada por Rusia. Más de 700 empresas francesas se han reunido este viernes con el presidente francés, Emmanuel Macron, y con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, este de forma telemática, para ponerse manos a la obra.

Según ha indicado Macron en un tuit, ya se está hablando de futuras inversiones. "Más de 700 empresas francesas se han unido para satisfacer las necesidades críticas de Ucrania ahora, prepararse para la reconstrucción del país y trabajar en futuras inversiones. Francia está haciendo su papel para participar en la reconstrucción de Ucrania", ha indicado. Según los cálculos de Kiev, para la reconstrucción del país serán necesarios unos 750.000 millones de euros. Se trata de una cantidad astronómica, el doble de lo que calcula el Banco Mundial, pero que según Zelenski sería asumible si se dedican a ello los fondos rusos que están congelados.

Alemania es el otro gran país europeo que ha empezado a prepararse para el plan Marshall, si bien no consta una iniciativa con las empresas como la que ha puesto en marcha Francia. En el mes de octubre, Berlín acogió una cumbre internacional sobre la reconstrucción de Ucrania, con la participación de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen. En el encuentro no se decidieron aportaciones económicas, sino propuestas sobre cómo establecer la estructura que el país necesitará para canalizar las ayudas a una reconstrucción.

El canciller alemán, Olaf Scholz, indicó en el encuentro en octubre, que la reconstrucción de Ucrania "será un trabajo de generaciones", y lo presentó como una inversión de cara el futuro. "Quien invierte hoy en la reconstrucción de Ucrania, invierte en un futuro Estado miembro de la UE con todo lo que comporta", añadió. Pero el canciller también hizo un llamamiento a Kíiv: "Al mismo tiempo, todo el mundo desearía ver más fiabilidad del Estado de Derecho, más transparencia y una lucha decidida contra la corrupción". Scholz habló de cara a la reconstrucción, de una Ucrania desarrollada, sostenible, resiliente, abanderada en la producción de energía verde, garante de la seguridad alimentaria e importante centro tecnológico europeo.

El plan Marshall original fue un programa que Estados Unidos impulsó para ayudar a los países europeos a recuperarse de la destrucción provocada por la Segunda Guerra Mundial. Fue presentado en 1947 por el secretario de Estado, George Marshall, y aunque su nombre oficial era European Recovery Plan, pronto se le conoció como plan Marshall. En virtud del plan, Estados Unidos ofreció asistencia técnica y administrativa a los países europeos, así como 13.000 millones de dólares de la época para reactivar las economías.