Los atentados que tuvieron lugar en Bélgica el martes pasado no sólo conmocionaron a Europa. También pusieron en duda hasta qué punto funcionan los sistemas de seguridad de Bélgica, y por extensión, de la Unión Europea. Por este motivo este jueves los Veintiocho decidieron reunirse de urgencia y abordar posibles medidas comunes para luchar contra el yihadismo

Después de que los ataques acabaran con la vida de 31 personas e hirieran a más de 300, los ministros del Interior de la Unión decidieron, a grandes rasgos, mejoraron el intercambio de información entre países y pusieron en marcha medidas concretas para ser más efectivos contra este tipo de ataques.

Más intercambio de información

Así pues, se mejorará la conexión entre las bases de datos nacionales e internacionales y el intercambio de de información, incluida también la de inteligencia. Compartir la inteligencia, sin embargo, no es fácil. Los países de la unión son reticentes a poner en común este tipo de información, y ponen en duda cuáles son los límites en que hay que proteger los datos y las fuentes, y quien se puede beneficiar. 

Sin embargo, según el ministro del Interior español en funciones, Jorge Fernández Díaz, este punto es "absolutamente indispensable". Fernández Díaz aseguró ayer en el marco del encuentro que hay que compartir inteligencia, investigación e inter-operabilidad de las bases de datos de los diferentes Estados para poder actuar con eficacia y derrotar el terrorismo". 

Control en la red

Los ministros también acordaron ayer intensificar su cooperación con los proveedores de internet para contrarrestar la propaganda terrorista y para acceder a las comunicaciones sensibles. Señalan, en concreto, que se tratará de "encontrar caminos" para "asegurar y obtener de forma más rápida y efectiva evidencias digitales", estrechando la cooperación tanto con terceros países como con empresas tecnológicas.

Una de las prioridades es conseguir "rastrear" los teléfonos móviles u ordenadores para localizar posibles ataques terroristas. Sin embargo, este es un punto difícil ya que muchas empresas no son demasiado partidarias. Apple, por ejemplo, ya se ha negado en alguna ocasión.

Y en las fronteras, también

La declaración menciona expresamente medidas como el refuerzo de los controles en las fronteras exteriores del espacio Schengen, dificultar la compra de armas de fuego y extender el sistema europeo de antecedentes penales (ECRIS) a países no comunitarios.

El acuerdo también habla de combatir la falsificación de documentos y desarrollar la cooperación antiterrorista entre la UE y Turquía y los países del norte del África, el Próximo Oriente y los Balcanes occidentales.

Por otra parte, se comprometen a aprobar en abril la creación de un registro europeo de pasajeros aéreos (PNR, en sus siglas en inglés). No es un acuerdo nuevo. El Consejo de la UE y el Parlamento europeo alcanzaron un acuerdo provisional sobre esta medida el mes de diciembre pasado, pero todavía tienen que oficializarlo.

Por este motivo, el comisario europeo de Interior, Dimistris Avramopoulos, se mostró muy crítico con la reacción de los gobiernos nacionales ante los atentados. "Cada vez que nos reunimos después de tales ataques nos repetimos, pero los compromisos significan muy poco si no se actúa, si no se cumplen", recalcó. "Alguna cosa tiene que cambiar", resaltó, "lo debemos a nuestros ciudadanos".