Hace una semana, ocho de los principales líder activistas prodemocracia de Hong Kong fueron detenidos por la policía. Fueron liberados el mismo día a cambio de pagar una fianza. Uno de estos líderes era Joshua Wong, líder del movimiento prodemocracia Demosistō, quien ahora ha escrito un artículo en el portal Quartz sobre "Cómo luchar por la democracia cuando el gobierno te quiere poner en la prisión".
El primero que explica Wong es que es importante fijarse en ciertos aspectos sobre las detenciones y como se produjeron. De esta manera el activista destaca que fueron arrestados de forma repentina y sin ningún aviso previo. También detalla que los detenidos son "partidarios públicos de alto perfil de los movimientos antigubernamentales y prodemocráticos". "El mensaje está claro: deja de resistirte o afronta la persecución", añade.
Wong también precisa que el gobierno prochino de Hong Kong "está intentando castigar a los líderes de las protestas para dar ejemplo". "Esta táctica mal calculada está condenada al fracaso, porque la descentralización es la característica definitoria de este movimiento", añade el líder activista, quien también explica que "los ciudadanos de Hong Kong están trabajando muy juntos sin "el ímpetu de los líderes de los movimientos tradicionales".
El activista demócrata también reivindica que "cada nuevo intento de intimidación por parte del gobierno ha sido respondido por una indignación y una solidaridad cada vez mayores de los ciudadanos de Hong Kong". "Además, el comportamiento imprudente del gobierno ha causado daños irreparables a su capacidad para gobernar y la legitimidad de la Policía de Hong Kong como agencia de aplicación de la ley", advierte.
Con todo esto explicado, Joshua Wong alerta que "si Carrie Lam (líder del gobierno de Hong Kong) o alguien de su régimen cree que arrestando a activistas prodemócratas y legisladores en massa, implementando la Ordenanza de Regulaciones de Emergencia –la cual otorgaría amplios poderes a Lam– o cualquier otro medida represiva dará un resultado diferente, se llevarán una profunda decepción".
Por último, Wong exige a Lam, entre otras medidas, el "verdadero sufragio universal". "Los ciudadanos de Hong Kong nunca se rendirán porque no tienen ningún sitio al que recurrir", sentencia.