China y los Estados Unidos han conseguido un acuerdo inicial para resolver sus diferencias comerciales, además de otras cuestiones como las transferencias tecnológicas, servicios financieros y la protección de la propiedad intelectual, y que supondrá que finalmente no sean aplicados los aranceles cruzados que ambas potencias tenían previsto imponerse respectivamente a partir del próximo domingo, según han informado las autoridades chinas y ha confirmado el presidente de los EE.UU., Donald Trump.

Varios representantes del Gobierno chino han anunciado este viernes en rueda de prensa que el acuerdo sobre el contexto para la primera fase de un tratado comercial con los Estados Unidos incluye el compromiso norteamericano de retirar los aranceles adicionales impuestos en las exportaciones chinas, mientras que el gigante asiático incrementará sus importaciones de productos energéticos y agrícolas norteamericanos.

"Con el acuerdo de primera fase EE.UU. se ha comprometido a revertir parte de los aranceles aplicados a productos chinos y a ampliar las exenciones para las exportaciones chinas", ha señalado en rueda de prensa Wang Shouwen, viceministro de Comercio de China, añadiendo que Pekín "no introducirá los aranceles que iban a aplicarse desde el 15 de diciembre".

Los funcionarios chinos, no obstante, declinaron ofrecer detalles sobre el alcance del acuerdo entre las dos potencias, así como de los aranceles que serían retirados, apuntando que el pacto todavía está "en fase de revisión", por lo cual los datos serán dados a conocer más adelante.

"Esperamos que EE.UU. cumpla honestamente su compromiso", ha afirmado Wang. "China no introducirá los aranceles que iban a aplicarse desde el 15 de diciembre", ha añadido. Entre los diferentes aspectos que cubriría el acuerdo conseguido, China se ha comprometido a incrementar sus importaciones de energía desde los EE.UU., así como la compra de productos agrícolas y farmacéuticos. "Somos un importante mercado de exportación para los productos agrícolas de los EE.UU. De hecho somos la destinación mayor para las exportaciones de algodón y soja norteamericanas", precisó el representante comercial chino.

El presidente de los EE.UU., Donald Trump, por su parte ha indicado que se trata de un acuerdo muy grande de primera fase" añadiendo que China ha acordado hacer "muchos cambios estructurales y compras masivas de productos agrícolas, energía y bienes manufacturados", aunque ha recordado que los aranceles del 25% se aplicarán, al lado del 7,5% sobre el resto.

"Los aranceles de penalización fijados para el 15 de diciembre no se aplicarán por el hecho que hicimos el trato", ha anunciado el presidente norteamericano en Twitter. "Empezaremos las negociaciones sobre el Acuerdo de la fase dos inmediatamente, en lugar de esperar hasta las elecciones del 2020. Es increíble para todo el mundo. ¡Gracias!", ha apostillado.