Después de meses de malas noticias con respecto al covid en China, Pekín afirma que el país ya ha superado el pico de esta ola de contagios. El anuncio llega poco antes de que se dé el pistoletazo de salida a las fiestas del año nuevo chino, lo que supone un gran número de desplazamientos por todo el territorio chino, especialmente de las grandes metrópolis a las áreas rurales.

El gran movimiento que hay en el país estos días dispara el riesgo de que crezcan los contagios. Sin embargo, las autoridades chinas han asegurado que ya se ha llegado a la cota máxima de pacientes ingresados con cuadros graves de covid-19, cifras que bajaron hasta un 44,3% llegados al 17 de enero. Las cifras de Pekín muestran que los ingresos en las salas de urgencias cayeron hasta un 44% después de llegar a sus máximos números el 2 de enero, siendo además que el 95% de las consultas y el 85% de los pacientes ingresados en los centros hospitalarios no tenían relación con el covid.

El primer año nuevo sin restricciones

Los ciudadanos chinos primera vez en años que no se encontrarán con medidas anticovid por estas fiestas. Las autoridades sanitarias son conscientes de los riesgos, de modo que han alertado a las administraciones de las áreas rurales por una posible propagación del virus. Son zonas donde tradicionalmente los recursos sanitarios son más escasos que en las grandes ciudades. "El punto álgido de la infección por covid en nuestro pueblo ha pasado, pero el festival se acerca y todavía hay habitantes que quedan atrás, especialmente personas mayores, con riesgo de infección secundaria," declaraba al principio de semana un médico de la provincia de Shaanxi.

Casi 60.000 muertes en un mes

La Comisión Nacional Sanitaria de China anunció un total de 59.938 muertes relacionadas con el covid desde el 8 de diciembre pasado, cuando las autoridades empezaron a relajar las restricciones que mantenían contra la pandemia. La edad media de las víctimas ronda los 80 años. Además, se ha expuesto que el 90,1% de los muertos tenían más de 65 años, y más del 90% sufrían enfermedades subyacentes.

La rápida propagación del virus en China estas últimas semanas ha sembrado dudas sobre la fiabilidad de las cifras oficiales, que hasta ahora solo habían informado de un pequeño número de muertos por la enfermedad, a pesar de las numerosas escenas de alta presión hospitalaria. La misma Organización Mundial de la Salud (OMS) ha criticado la gestión de los datos epidemiológicos chinos. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS, aseguró la semana pasada que China no está dando cifras completas de muertes por covid en el actual brote.