Tres menores de edad de la República Centroafricana han acusado de abusos sexuales en "cascos azules" mauritanos. Después de llevar a cabo una investigación preeliminar impulsada de inmediato por la ONU, se ha confinado un sospechoso. La misión de mantenimiento de paz en este país, denominada Minusca, recibió las denuncias el pasado 24 de septiembre.

El país contribuyente de las tropas implicadas, Mauritania, ha sido informado sobre el caso por la oficina de las Naciones Unidas en Nueva York y ha pedido que se abra una investigación a nivel nacional que resuelva el asunto en menos de 90 días.