Una de las zonas más afectadas por el terremoto que ha sacudido el centro de Italia ha sido la localidad de Amatrice, donde todavía quedan personas atrapadas entre los escombros. El movimiento sísmico se ha producido a 60 kilómetros de L'Aquila, donde en 2009 un seísmo de una magnitud parecida, de 6,3 grados, causó más de 300 muertos y 1.500 heridos.