Si tenéis la suerte de poder comprar una vivienda de obra nueva, habréis comprobado como el suelo que más predomina y uno de los más escogidos es el parqué. Esta elección, aunque puede ser una de las más bonitas y estéticas, también requiere de un cuidado exhaustivo para que este material no se deteriore.
😮No digas nunca más 'apretar': estas son las formas correctas en catalán
Aceite de girasol, la clave para limpiar el parqué
Para que esto no suceda, mucha gente protege los muebles de su casa con fundas o cartuchos de silicona para que estos no dañen la superficie del parqué o incluso compran productos de limpieza especializados en limpiar esta superficie. Sin embargo, a continuación os traemos una solución casera para que recuperéis el brillo de vuestro parqué como si fuera el primer día que lo veis sin necesidad de que gastéis ni un euro.
El aceite puede ser vuestro mejor aliado para limpiar el parqué sin esfuerzo en verano. Este líquido se usa desde hace muchos años, además de para cocinar, para restaurar la madera de los hogares, ya que cuenta con propiedades limpiadoras y antibacterianas. Para llevar a cabo este truco, podéis hacer servir todo tipo de aceite, pero el que mejor funciona para estos casos es el aceite girasol.
Para proceder con este gran truco, debéis aplicar unas pocas gotas de aceite de girasol en un trapo o bayeta y frotar haciendo círculos sobre el parqué. Eso sí, para que este método resulte efectivo deberéis frotar con más fuerza sobre las zonas que estén más sucias o dañadas, de esta manera conseguiréis que vuelvan a estar relucientes. Una vez hayáis frotado por todo el suelo, en unos minutos podréis comprobar como el aceite empieza a hacer el efecto deseado, aunque deberás tener paciencia para que se seque toda la zona que habéis limpiado antes de volver a poner un pie en ella.
Actuar antes de que sea tarde
De esta manera, ya sabéis como podéis limpiar el parqué sin dañar-lo con simple aceite de girasol, sin usar productos de limpieza que os pueden resultar bastante más caros. Como recomendación, si dejáis pasar mucho tiempo sin limpiar las zonas más dañadas o sucias de vuestro suelo, es posible que este truco no os sirva y debáis llamar a un especialista o incluso tengáis que restaurar el parqué, por lo que os recomendamos actuar antes de que sea demasiado tarde.
Una limpieza regular, acompañada de cuidados sencillos como este, puede marcar la diferencia entre conservar un parqué brillante durante años o tener que afrontar costosas reparaciones. Cuidar de vuestra casa no siempre requiere grandes esfuerzos: a veces, el secreto está en los pequeños gestos del día a día.