Durante décadas, el bidé ha sido un elemento indispensable de los baños catalanes. Formaba parte de aquel conjunto de piezas básicas que no podían faltar en ningún hogar, símbolo de higiene y de una cierta elegancia doméstica. Pero el tiempo pasa, los espacios se hacen más pequeños y las modas cambian. Lo que antes era un elemento imprescindible, ahora se ha convertido en un objeto prescindible que muchos prefieren eliminar para ganar espacio y comodidad. Quitar el bidé del baño, sin embargo, no tiene que implicar renunciar a la función que hace: tiene un sustituto de moda que, para los expertos, es más limpio y elegante.
Adiós al bidé en el baño: la nueva tendencia de moda es más limpia y elegante
La fiebre por los bidés los convirtió en un básico para los baños de todas las casas, y no tener uno era, hace unas décadas, casi una excentricidad. Formaban parte de un ritual de higiene ya cotidiano, que se consideraba imprescindible, especialmente en Europa. Pero ahora es evidente que la moda ha cambiado y que, para muchos, se han transformado en un elemento totalmente obsoleto, más propio de otra época que de un baño moderno.
Y es que, desde el punto de vista actual, un bidé ocupa un espacio considerable y, en viviendas pequeñas o baños de tamaño reducido, puede acabar siendo más un estorbo que una utilidad real. Las tendencias actuales apuestan por espacios más minimalistas, donde la practicidad marque la norma y cada elemento tenga una función clara. Por eso, muchas personas han optado por quitarlo, ganando así espacio y comodidad, aunque no han querido renunciar a su función original y han buscado una alternativa más moderna y funcional: la ducha higiénica, también conocida como ducha lateral. Se trata de un pequeño rociador instalado al lado del inodoro que permite mantener la misma higiene personal que un bidé, pero sin ocupar espacio adicional. Este sistema, muy común en países como Japón, Francia o el Reino Unido, se ha ido extendiendo gracias a su comodidad, a su diseño discreto y al hecho de que su instalación es sencilla, sin necesidad de grandes reformas.
Si este modelo exterior no te convence, cabe recordar las ya famosas tazas inteligentes, otra alternativa que combina tecnología e higiene. Estas tazas incorporan directamente un sistema de chorro de agua que permite realizar la limpieza de una manera más suave, eficiente y personalizada, con opciones de temperatura e intensidad regulables. Puede parecer que estos modelos solo existen en países amantes de la tecnología como Japón, pero la realidad es que cada vez son más accesibles y fáciles de encontrar. De hecho, ya se comercializan en tiendas especializadas y grandes superficies de aquí, y cada vez más hogares apuestan por su combinación de confort, elegancia y sostenibilidad.