Tal día como hoy del año 1721, hace 304 años, en París, nacía Jeanne-Antoinette Poisson, que en el transcurso de su vida se convertiría en uno de los personajes más poderosos de la corte de Francia. En 1744, con veintitrés años, se convirtió en la amante oficial del rey Luis XV (bisnieto y sucesor de Luis XIV), y para ser presentada y reconocida en la corte de Versalles como tal, el rey la obsequió con el título de marquesa de Pompadour, que implicaba la propiedad de un castillo-palacio y un extenso latifundio en Périgord (al noreste de Aquitania).
Como amante oficial del rey acumuló un gran poder, que empleó en la fabricación de guerras y en la proposición de paces. Fue especialmente odiada por la aristocracia cortesana de Versalles, tanto por su influencia sobre el rey como por su origen plebeyo (era hija de un financiero de París que había tenido responsabilidades de gobierno, pero que era de clase plebeya y, además, había estado implicado en un gran escándalo de corrupción). Durante mucho tiempo, haciendo un juego de palabras con su apellido, fue llamada la Poissonier (la pescadera).
No obstante, Pompadour pasaría a la historia como la introductora en la corte de Versalles de un elemento de baño inventado poco antes en la península italiana: el bidé, que rápidamente fue adoptado como un elemento de higiene íntima y para uso contraceptivo. Este elemento pasó de Versalles a todas las cortes europeas, y su nombre y su uso quedarían —para siempre— asociados a Pompadour. Al mismo tiempo, le colgaron una cita que intentaba expresar la enorme cuota de influencia y de poder que tuvo, y que decía: “Después de nosotros (de Pompadour y del rey), el diluvio”.