Tal día como hoy del año 1931, hace 92 años, en Barcelona; moría Teresa Claramunt i Creus; que en el transcurso de su vida fue una de las personas más influyentes del movimiento anarquista catalán y una pionera en la lucha por la igualdad de género. En 1891, fue cofundadora de la Sociedad Autónoma de Mujeres de Barcelona; la primera organización de carácter feminista de la historia de la península Ibérica que, poco después (1892), se transformó en la Sociedad Progresiva Femenina. Esta organización defendía la emancipación de la mujer y reivindicaba el derecho de las mujeres a participar en todos los niveles de la vida social y política.
Teresa Claramunt nació en Sabadell en 1862, en una familia formada por Ramon Claramunt y Joaquima Creus, obreros textiles de ideología republicana. La represión empresarial y policial que sufrieron los obligó a cambiar de residencia en varias ocasiones (1868-1874). De retorno a Sabadell, una Teresa adolescente pero muy comprometida socialmente se implicó en el movimiento anarquista que lideraba el profesor Ferran Tarrida del Mármol. Entre 1884 y 1924 fundó varios medios de difusión del feminismo; y fue una líder en la lucha por la igualdad de género y por los derechos de la clase trabajadora. Por este motivo sufrió una brutal persecución policial.
Fue detenida y torturada después de la explosión de las bombas del Liceo (1893) y del atentado —probablemente de falsa bandera— de la calle dels Canvis Nous (1896). Fue, también, detenida y torturada después de la Huelga General (1902), de la Semana Trágica (1909) y del atentado anarquista contra el cardenal Soldevila (1923). Las autoridades gubernativas nunca la pudieron relacionar con ningún acto violento. Pero la madrugada del 11 de abril de 1931, a la víspera de las elecciones municipales que conducirían a la proclamación de la República, sufrió un fallo multiorgánico, a causa de las torturas que le había infligido repetidamente la policía española; que le causaron la muerte.