Tal día como hoy del año 2011, hace 13 años, en Barcelona, moría la empresaria Flora Cadena i Senallé, que fue una de las personalidades del mundo económico más importantes del siglo XX en el Pirineo leridano. Flora Cadena fue una pionera de la actividad turística de montaña en la comarca del Pallars Sobirà. En 1966, promovió la construcción del Hotel Comtes de Pallars, que sería el embrión del primer complejo turístico del Pallars Sobirà. Y en 1967, impulsó la estación de esquí de Llessui (la primera que se creó en la comarca del Pallars Sobirà y la segunda en el Pirineo leridano, después de la de Baqueira Beret).

Flora Cadena había nacido en el año 1917 en Rialp (Pallars Sobirà), en una familia conocida como Casa El Pere de Rialp. Se casó muy joven, con un negociante de maderas de la comarca, y enviudó poco después. En ese momento inició su personal singladura empresarial, al tomar el relevo de su difunto marido (1947). Flora Cadena se trasladó a Barcelona, pero nunca perdió de vista que el Pallars Sobirà —como la mayoría de comarcas de montaña— estaba inmerso en una profunda depresión económica y demográfica. Había pasado de los 21.000 habitantes de 1880 a menos de 5.000 en 1960.

Flora Cadena siempre se sintió muy vinculada y comprometida con Rialp y con el Pallars Sobirà, y centró todo su esfuerzo empresarial en la promoción económica de la tierra que la había visto nacer. En este punto, contó con el apoyo de muchas personas relevantes a las que había sabido convencer para impulsar su proyecto. Después de los negocios turísticos, en la década de 1980, fundó la empresa embotelladora y distribuidora de agua mineral Aigües del Pallars, en Rialp. Y en la de 1990, accedió al negocio inmobiliario y promovió algunas urbanizaciones, como la Borda de Paisan, en Sort. Actualmente, la calle principal de Rialp se llama avenida Flora Cadena.