Tal día como hoy del año 1932, hace 91 años, en Madrid, moría el músico Amadeu Vives i Roig, que había logrado una gran notoriedad social como cofundador, en 1891, del Orfeó Català (junto con el también músico Lluís Millet) y un gran prestigio artístico como compositor de obras corales que tendrían una gran difusión y gozarían de una extraordinaria popularidad en la Catalunya de la Renaixença cultural y política, durante las últimas décadas del siglo XIX y primeras del XX.

A la musicología nacionalista española le gusta glosar la figura y la obra de Vives por el repertorio de zarzuelas que compuso. Pero, en Catalunya, la popularidad del maestro Vives llegaría con la armonización de varios poemas populares, como "L'emigrant" de Jacint Verdaguer (1893) o "La Balanguera" de Joan Alcover (1926). "L'emigrant" se convertiría en el himno de la emigración catalana a América, a caballo entre los siglos XIX y XX, y del exilio catalán tras la Guerra Civil Española (1939).

Amadeu Vives había nacido en el año 1871 en Collbató (Baix Llobregat), en una familia humilde de panaderos, formada por Rafel Vives, de Sants, y Josefa Roig, de Torrelles de Llobregat. Con tan solo seis años (1877), sufrió una poliomielitis que le provocó una parálisis del brazo y la pierna izquierdos que arrastraría toda su vida. No obstante, desarrolló una extraordinaria carrera musical, que empezó en su casa —de la mano de su hermano mayor— y culminó en Barcelona —en el Palau de la Música—.

A partir del año 1900, inició una relación profesional con Madrid, que se intensificó con el tiempo. De todas formas, nunca perdió su relación con Catalunya. Duramente criticado por su actividad artística en Madrid —composición de música popular española—, declararía que "Os aseguro que toda mi música es pensada y escrita en catalán". Y en las elecciones municipales de 1931, fue candidato a concejal de Barcelona por el partido soberanista Acció Catalana, liderado por Carrasco i Formiguera.