Tal día como hoy del año 1939, hace 82 años, en el contexto de las semanas inmediatamente posteriores a la ocupación franquista de Catalunya y a la conclusión de la Guerra Civil española; las autoridades del nuevo régimen agasajaban con una comida de gala en el Hotel Ritz de Barcelona los generales Mazetti i Bottari, líderes de la Gioventú Italiana del Littorio, la rama juvenil del Partido Nacional Fascista italiano. Mazetti y Bottari, estaban de visita oficial en España, invitados por el filonazi Ramon Serrano-Suñer; ministro de gobernación y Jefe Político de Movimiento, para estrechar relaciones con las organizaciones juveniles del régimen nacionalcatólico franquista.
Según la prensa de la época (La Vanguardia Española, edición del 06/06/1939); aquella visita oficial se había iniciado dos días antes, durante los cuales Mazzetti y Bottari se habían entrevistado con los cabecillas del nuevo régimen en Catalunya y, acompañados por las autoridades locales, habían visitado varios lugares de la ciudad. Aquel despliegue de lujo y boato, oportunamente organizado por el aparato propagandístico del régimen franquista; contrastaba con el hambre y la miseria que cubría la ciudad; especialmente visible en las colas de racionamiento y en el brutal amontonamiento de presos políticos en condiciones infrahumanas en varios centros de detención de la ciudad.
También aquella demostración de fuerza y de lujo del régimen nacionalcatólico, contrastaba con la epidemia de tuberculosis que se había declarado dos semanas antes (16/05/1939); y que acabaría costando la vida a un mínimo de 1.730 personas. Mientras el Ayuntamiento y la Diputación franquistas —dirigidas, respectivamente, por Miguel Mateu Pla y José Maria Milà Camps— proclamaban públicamente que no tenían recursos económicos para hacer frente a aquella epidemia; se gastaban el dinero agasajado las visitas de los cabecillas de los regímenes que habían dado apoyo a la rebelión franquista: misas de campaña en el centro de la ciudad; desfiles militares y paramilitares; y festines para docenas de invitados.