Tal día como hoy del año 1977, hace 41 años, en el contexto de la llamada Batalla de València, moría en el hospital de Alacant el militante del Movimiento Comunista del País Valencià Miquel Grau i Gómez, de 19 años de edad. Diez días antes (6 de octubre) Grau fue atacado, mientras colgaba carteles de la Diada del Nou d'Octubre (Fiesta nacional del País Valencià) en la plaza dels Cavalls ―de Alacant―, por el militante ultraderechista Miguel Ángel Panadero Sandoval, de 19 años de edad. Grau recibió el impacto en la cabeza de un bloque de cemento de dos kilos que Panadero le lanzó desde un séptimo piso, provocándole el hundimiento del cráneo y la pérdida de masa encefálica. Aunque sus compañeros lo trasladaron inmediatamente al hospital, acabaría muriendo diez días después.

La brutal agresión y la trágica de muerte de Miquel Grau convertiría su figura en un símbolo de la lucha por las libertades nacionales del País Valencià. La Diada del 9 d'Octubre, con Miquel Grau debatiéndose entre la vida y la muerte, más de cinco mil personas se concentraron en la Esplanada de Alacant, en protesta contra aquella agresión en particular y contra todas las agresiones que, impunemente, perpetraba la ultraderecha españolista en el País Valencià. Y al día siguiente de su muerte, 17 de octubre, más de diez mil personas acompañaron el féretro al entierro. Pocos meses después, el padre de Miquel Grau moriría a causa de la profunda depresión que le causaron los trágicos hechos.

Asesinan a Miquel Grau, símbolo de la lucha por|para las libertad nacionales del País Valencià. Fotografía del entierro. Font Asociación Cultural Alicante Vivo

El 11 de diciembre de 1978, la policía detenía a Panadero, hijo de un conocido empresario de gasolineras de Alacant. Y siete meses después del asesinato ―el 12 de mayo de 1978― un tribunal probaba que era el autor material del crimen, y lo condenaba por homicidio a doce años y un día de prisión. Pero a pesar del perfil del acusado que dibujó el fiscal, "ni siente, ni ama, ni se preocupa", sólo acabaría cumpliendo cuatro. Un año después del juicio, el ministro de Justicia Íñigo Cavero ―del gobierno de la UCD que presidía Adolfo Suárez― concedió el indulto parcial al asesino de Miquel Grau, y el año 1982 ya se encontraba en libertad. Según una reciente investigación del semanario El Temps, Panadero es actualmente procurador de los tribunales en València ciudad.