Tal día como hoy del año 1925, hace 93 años, Francesc Macià, entonces líder de la formación política independentista Estat Català, ponía en circulación el empréstito Pau Claris, destinado a financiar la operación militar de Prats de Molló. Aquel empréstito se articuló en una emisión de bonos de valor nominal de 25, 100, 500 y 1000 pesetas. El valor total de la emisión fue de nueve millones de pesetas (el equivalente actual a unos 135 millones de euros), cubiertos totalmente por empresarios catalanes establecidos en el continente americano (especialmente en Cuba, México y Argentina) y simpatizantes de Estat Català en el Principado de Catalunya.

Macià emite l'emprestit Pau Claris para financiar la liberación de Catalunya. Publicidad de l'emprestit. Fuente Xavier Bescós

Publicidad del empréstito. Fuente: Xavier Bescós

Un año y medio después (octubre de 1926) Macià consiguió reunir un arsenal y armar un pequeño ejército que tenía que penetrar en el Principado desde Prats de Molló —un pequeño pueblo situado a 60 kilómetros en el suroeste de Perpinyà— y provocar una revuelta generalizada que tenía que desembocar en la proclamación de la independencia de Catalunya. La operación, sin embargo, fue abortada por la Gendarmería francesa el 4 de noviembre de 1926 a causa de la delación de una de las personas de confianza de Macià, el italiano Ricciotti Garibaldi, nieto del mítico unificador de Italia Giuseppe Garibaldi, que se había presentado con una columna de cien anarquistas para colaborar en la acción armada.

Garibaldi resultó ser un agente secreto del régimen fascista italiano de Benito Mussolini. Sería Garibaldi quien informaría al Duce de los planes de Macià de asaltar los cuarteles militares del ejército español y la Guardia Civil de las cuencas altas del Ter y el Llobregat. Esta filtración se explica porque en aquel momento el estado español estaba gobernado por el régimen dictatorial criptofascista de Primo de Rivera (1923-1930), aliado de Mussolini. 220 personas fueron arrestadas y posteriormente (20-23 de enero de 1927) Macià, Garibaldi y diecisiete personas más fueron juzgados. La justicia francesa lo resolvería con una condena de dos meses de encarcelamiento y la expulsión del territorio francés.