Tal día como hoy del año 1640, hace 378 años, la Junta de Brazos del Principat (el máximo organismo político de Catalunya) se reunía con carácter de urgencia en el Palau de la Generalitat para debatir y aprobar el presupuesto de gasto de guerra defensiva contra la monarquía hispánica. Cuando se produjo el debate y aprobación del gasto, que se presupuestó en 360.000 libras barcelonesas (el equivalente aproximado a 400 millones de euros), hacía siete semanas que Joan Pere Fontanella ―en nombre del gobierno de Catalunya― y Armand du Plessis-Besançon ―en nombre de la monarquía francesa― habían firmado una alianza política y militar que se denominaría Pacto de Ceret (7 de septiembre de 1640).

En aquella alianza se especificaba que "el Principat se obliga al dit senyor rei de França de no pendre’s més les armes contra França, directa o indirectament, i de no sofrir que les armes del rey de Espanya o d’altra nació transiten per dit Principat” y "“lo chrstianissim rei promet de no prendre les armes contra el Principat y els comtats de Rosselló i Cerdanya, ans que’ls auxiliarà en esta i qualsevol ocasió”. La invasión hispánica del Principado, iniciada poco después del Corpus de Sangre (junio de 1640), que se materializó con el asalto a Tortosa y el fusilamiento de veintidós personas, precipitaría tanto el acuerdo de Ceret como la carta que la Junta de Brazos enviaría a Versalles.

En aquella carta la Junta de Brazos informaba a la cancillería de Luis XIII de que se había aprobado el gasto para levar el ejército de Catalunya y solicitaba hacer efectivo el Pacto de Ceret con el envío de tres mil soldados de infantería y dos mil caballos con cargo al presupuesto de la Generalitat: “soldats veterans i ben armats, ab alguns acabos y offisials, los quals tots han de militar baix dels òrdens del General de dit Principat”. Y también se garantizaba el mantenimiento de aquella tropa “que cada soldat de cavall haurà de ser pagat adelantat a rahó de quinse escuts per mes, lo menos, y lo infant o peó a sinch escuts per més, que al menos se puga viure sense molestar lo pays”.