Tal día como hoy del año 1567, hace 454 años, se libraba la Batalla de Oosterweel, al norte de la ciudad de Anvers, que enfrentó a un ejército formado por las milicias independentistas del condado de Flandes -comandadas por Jan de Marnix-, y las tropas de la monarquía hispánica, integradas por los Tercios de Castilla y comandadas por Beauvois. Aquella batalla se considerada el punto de inicio de la Guerra de los Ochenta Años (1568-1648), que culminó con la independencia de las Diecisiete Provincias Unidas, la parte mayoritaria del territorio de habla neerlandesa y de confesión reformista de los Países Bajos, en aquel momento bajo dominio de la monarquía hispánica.

El condado de Flandes formaba parte del edificio político hispánico desde que en 1518 Carlos de Gante reunió la herencia de sus abuelos. Por parte de sus abuelos maternos (los Reyes Católicos) había heredado los estados peninsulares (las coronas catalano-aragonesa, castellano-leonesa y navarra), y por parte de su abuela paterna había heredado el Franco Condado y los Países Bajos (Borgoña, Bravant y Flandes). Desde un inicio, las relaciones entre el condado de Flandes y el poder central hispánico habían sido conflictivas, y aquella tensión se había incrementado notablemente desde la coronación de Felipe II -hijo y heredero de Carlos de Gante- (1556), con sus políticas centralistas, autoritarias, represoras y depredadoras.

Aquella batalla se saldó con la victoria de los hispánicos, pero este revés inicial no desanimó a los independentistas. El aparato de dominación hispánico, dirigido políticamente por Margarita de Austria (hermana de Felipe II) y militarmente por el duque de Alba; reaccionó con una brutal represión que culminaría con la masacre de Anvers (04/11/1576): el asesinato indiscriminado de más 10.000 civiles desarmados, en un episodio que la tradición hispánica ha denominado "furia española". También, durante aquella época, la administración hispánica instituyó el Tribunal de los Tumultos (1567); más conocido como Tribunal de la Sangre; que, durante años, detuvo, torturó, encarceló y asesinó miles de personas.