Tal día como hoy del año 1099, hace 919 años, moría en València el mercenario castellano Rodrigo Díaz de Vivar que, con su hueste de guerreros a sueldo, cinco años antes (1094), había conquistado a título particular la taifa musulmana de Balansiya (València) y había establecido un señorío independiente que, junto con sus familiares más directos, gobernaría hasta su muerte (1099). El dominio territorial del Cid comprendía los territorios de la mitad norte del futuro reino de València, actual País Valencià, pero su efímera existencia no permitiría la consolidación de ninguna de las instituciones políticas y religiosas propias del mundo cristiano.

Díaz de Vivar había ejercido el cargo de alférez de Castilla, hasta que, a causa de las luchas intestinas en la corte de Burgos que provocarían el asesinato de su patrón, perdería su posición. Posteriormente, se ganaría sobradamente la vida como jefe de una hueste de guerreros que luchaban para el mejor postor o, sencillamente, para quien los contrataba. En el conflicto permanente que enfrentaba los reinos cristianos y las taifas musulmanas lucharía tanto en el bando de los unos como de los otros. En una ocasión luchó a favor del rey musulmán de Zaragoza (aliado de Castilla) que estaba enfrentado con el rey musulmán de Lleida (aliado de Barcelona), por el simple hecho de que el poder condal catalán había rechazado sus servicios.

En 1090 inició la conquista de la taifa valenciana. Pero su dominio sobre el territorio no fue nunca efectivo. Los almorávides ―una tribu de guerreros procedentes del Sáhara― ya habían puesto el pie en la península y habían conseguido revertir, momentáneamente, la crisis del mundo islámico peninsular. Cómo se sentía incapaz de contener el avance almorávide, buscó alianzas con los reinos cristianos, y casó a su hija mayor y heredera, María Díaz, con Ramón Berenguer III, conde independiente de Barcelona (1098) y la segunda, Cristina Díaz, con el infante Ramiro de Navarra. La muerte del Cid (1099) provocaría la crisis y la posterior reversión de su señorío a dominio musulmán (1109).