Tal día como hoy del año 1713, hace 307 años, en el marco de la Guerra de Sucesión hispánica (1705-1715), los Tres Comuns (el equivalente al Parlament) se reunían para votar la postura del Principado después de la retirada del conflicto de los ejércitos de la alianza internacional austriacista. Seis días antes (30/06/1713) —y en virtud del Convenio de L'Hospitalet (22/06/1713)—, Konigsegg, representante de Starhemberg (lugarteniente de Carlos de Habsburgo en Catalunya), ordenaba la evacuación de territorio catalán de las últimas tropas de la alianza internacional austriacista. A partir de aquel momento el conflicto sucesorio, en París y en Madrid sería denominado Guerra de los Catalanes (1713-1714).
En aquel contexto de crisis, los Tres Comuns se reunieron para votar una capitulación honrosa o la resistencia a ultranza. Según las fuentes documentales, el voto de los 120 representantes políticos de Catalunya se distribuyó entre 75 votos a favor de la resistencia a ultranza y 45 votos a favor de negociar (naturalmente, sin garantías de éxito) una capitulación honrosa. A partir de aquel momento, aquel organismo pasaría a llamarse Junta de Guerra y asumiría todo el poder político y militar del Principado. Su primero y único presidente, que asumiría, también las funciones de general en jefe del Ejército de Catalunya; sería Rafel de Casanova.
La figura de Rafel de Casanova (hasta entonces conseller en cap, equivalente a alcalde del Consell de Cent, el gobierno municipal de Barcelona) adquiriría una gran dimensión. En aquel pleno, Casanova había votado a favor de negociar una capitulación honrosa. Pero sin renunciar a sus principios, aceptó el resultado democrático de aquella votación y asumió el mandato de aquella Cámara. Todo lo contrario que Josep de Vilamala, el último presidente de la Generalitat foral, también partidario de la capitulación negociada, que prefirió mantener un perfil bajo. Durante el asedio (1713-1714) Casanova se reveló como un excelente administrador de la ciudad y como una jefe militar juiciosa y respetado.