Tal día como hoy del año 1311, hace 709 años, la Compañía Catalana de Oriente —popularmente almogávares y comandada, provisionalmente, por Bernat Estanyol— ocupaba Atenas y plantaba la bandera cuatribarrada en la histórica Acrópolis. Aquella conquista venía precedida de la Batalla del río Cefis (13-15 de marzo de 1311), que se había saldado con una victoria espectacular de los almogávares sobre el ejército de Gautier de Brienne, hasta entonces duque independiente de Atenas.

La relación entre Gautier de Brienne y los almogávares remontaba al año anterior (1310). El dominio de Brienne sobre la península de la Ática (actualmente la parte sur de Grecia), estaba amenazado por la política expansiva del Imperio Roma de Oriente, y de su soberano Miquel IX Paleòleg, que quería recuperar aquellos antiguos territorios bizantinos. En aquel contexto, Brienne había contratado a los almogávares para hacer frente a aquella amenaza; y estos habrían respondido recuperando treinta castillos ocupados por los bizantinos.

Pero la devastación que habían causado los almogávares, habría dejado Brienne en una posición muy comprometida ante su cuerpo nobiliario que, resuelto el conflicto, percibían la Companya Catalana como una amenaza instalada en el interior del ducado. En aquel momento Brienne intentó expulsar a los almogávares sin, ni siquiera, pagarles los servicios argumentando que con el botín que habían capturado se podían sentir más que bien remunerados.

El 13 de marzo, los almogávares y el ejército de Brienne —con una caballería formada por nobles franceses— se enfrentaron en el río Celis. Previamente los almogávares, conscientes de su inferioridad numérica, habían sembrado de obstáculos el campo de batalla para impedir el avance de la caballería pesada de Brienne. Esta estrategia, que sería la primera vez en la historia que se utilizaba, provocaría —también por primera vez en la historia— la derrota y masacre de una caballería pesada en manos de una infantería ligera.

El 15 de marzo los almogávares entraban en Atenas, y conseguían el dominio del ducado. Bernat Estanyol se proclamó nuevo duque de Atenas, y se puso bajo el vasallaje de Frederico, hijo de Pedro II de Barcelona-Aragón y de Constanza de Sicilia, hermano pequeño del conde-rey Jaime II, y rey de Sicilia en la órbita política de Barcelona. Después de la conquista almogávar de Atenas, la bandera catalano-siciliana (cuatribarrada y con el águila) ondearía en la cima de la Acrópolis durante ochenta años.