Tal día como hoy del año 1813, hace 209 años, el rey José I Bonaparte, salía del territorio español por la presión militar de los ejércitos británico y portugués y de las tropas rebeldes españolas. José I había sido nombrado rey de España en Bayona (País Vasco francés) el 8 de mayo de 1808, después de que los reyes Borbones hispánicos Carlos IV y Fernando VII hubieran vendido la corona española al emperador francés Napoléon I. Unas semanas más tarde, el 9 de julio de 1808, José I había sido coronado, en Madrid, legítimo rey de España. José I había sido, también, el primer rey constitucional de la historia de España: había promulgado la Carta de Bayona (1808); que sería el primer texto constitucional español.
Las sucesivas derrotas que sufrió el ejército del régimen bonapartista español de José I a manos de las armas extranjeras y de la sedición local, lo obligaron a trasladar su corte a Vitoria-Gasteiz; que sería la última sede de su gobierno antes de atravesar la frontera hispano-francesa. Entre los exiliados que lo acompañaron, destacaba Maria Pilar Acedo y Sarrià, vasca con orígenes maternos catalanes y condesa de Echauz, considerada la principal figura intelectual femenina de la España de la época. En el exilio de Pau (departamento de los Pirineos Atlánticos franceses); Maria Pilar Acedo y Sarrià creó una corte de intelectuales que, en algún momento, contrapesó los cenáculos culturales borbónicos postbonapartistas de París.
Pero esta situación no afectó a Catalunya. En mayo de 1808, Napoleón había separado el Principado del reino de España y lo había incorporado al Primer Imperio francés como una región más. Y la evolución del conflicto bélico en la península no tuvo ninguna repercusión importante en el Principado, entonces la región más meridional de Francia. Catalunya quedaría totalmente al margen de lo que pasaba en el reino de España; y seguiría formando parte del estado francés hasta que, meses después de la Batalla de Leipzig (octubre de 1813) el régimen bonapartista francés se plantearía abandonar los territorios anexados: Países Bajos y Catalunya. Hasta pasado casi un año, el 28 de mayo de 1814, no se produciría el inicio del abandono de las tropas bonapartistas del Principado.