Tal día como hoy del año 1410, hace 612 años, el ejército comandado por Fernando de Trastámara; y formado por las huestes real y nobiliarias castellanoleonesas y tropas mercenarias catalanas, navarras y aquitanas; conquistaban la ciudad nazarí de Antikaria. Aquella operación tenía una gran importancia, porque Antikaria (la actual Antequera) era la encrucijada de caminos más importante del reino nazarí de Granada. Por Antikaria pasaban los caminos que unían Granada —la capital— con Málaga —uno de los dos principales puertos del reino—; y las cordilleras situadas en los extremos norte y oeste de los dominios nazaríes, que actuaban como murallas naturales de protección del reino de Granada.

Aquella empresa militar requirió un gasto económico importante, que fue financiado por el mismo Fernando y por su esposa Leonor de Alburquerque, que en Castilla era denominada la "Ricahembra" por su inmensa fortuna patrimonial. Después de la conquista de la plaza; que se protocolizó, definitivamente, el 22 de septiembre con la salida pactada de toda la población islámica de la ciudad hacia la villa de Archidona; Fernando de Trastámara, que en aquel momento era el corregente de la Corona castellanoleonesa, por la minoría de edad de su sobrino Juan II; se declaró señor patrimonial de Antequera, y pasó a llamarse Fernando de Antequera.

En el momento en que Fernando culminó aquella empresa militar, ya había presentado su candidatura a heredar el trono de Barcelona (su tío materno Martín I había muerto el 31 de mayo sin descendencia legítima). Con la corregencia de la Corona castellanoleonesa, ya había mostrado a todo el mundo sus capacidades de gobierno. Pero con el éxito de aquella empresa —buscado insistentemente y monopolizado particularmente—, y con la adquisición del patronímico de Antequera, pretendía mostrar, también, y especialmente a los estamentos de poder catalanoaragoneses, su capacidad personal para comandar ejércitos y conducirlos a victorias sonadas.