Tal día como hoy del año 1082, hace 1.040 años, en el paraje de la Perxa de l’Astor (entonces condado independiente de Girona y actualmente término municipal de Sant Feliu de Buxalleu, la Selva), unos desconocidos emboscaban y asesinaban a Ramón Berenguer II, conde independiente de Barcelona, de Girona, de Osona, de Carcasona y de Rasés. Según las fuentes de la época, Ramón Berenguer II, que compartía el gobierno de los condados con su hermano gemelo Berenguer Ramón II, viajaba de Barcelona a Girona cuando fue asaltado y asesinado. En cambio, las mismas fuentes no aclaran qué hizo su guardia personal para repeler el ataque y proteger la vida del conde.

Por este motivo, enseguida se extendió el rumor de que había sido asesinado por orden de su hermano Berenguer Ramón II e, incluso, se señaló a su guardia personal como los autores del magnicidio. La investigación historiográfica moderna apunta hacia esta posibilidad, sin confirmarla. E, incluso, algunos historiadores sostienen que Berenguer Ramón II habría urdido la muerte de su hermano para restaurar su prestigio personal y militar. El hermano sospechoso había sido derrotado y humillado en un episodio bélico en Almenar —valle del Segre— (1082) que había enfrentado a sus huestes y las del emir de Lleida, contra las de Cid Campeador y el emir de Zaragoza.

Los dos hermanos habían recibido el condominio de los condados de sus padres Ramón Berenguer I y Almodís de la Marca; que, años antes, habían protagonizado una historia de amor, con secuestro de la novia incluido, muy comentada a las cortes europeas de la época. Ramón Berenguer II, la víctima, sería llamado "Cabeza de Estopa", muy probablemente por su cabellera rubia, lo cual apunta que tenía el reconocimiento de las clases baroniales del país, que de esta manera lo distinguían con un calificativo agraciado. Pero, en cambio, después de los hechos de la Perxa de l’Astor, Berenguer Ramón II, que había quedado como el único gobernante, sería reveladoramente llamado "el Fratricida".