Tal día como hoy del año 1880, hace 142 años, en Barcelona; aparecía el primer número de la revista La Il·lustració Catalana; que era la primera publicación gráfica escrita en catalán. La Il·lustració Catalana fue creada por el editor Carles Sanpons i Carbó; y la primera redacción estuvo situada en la calle de la Unió, 28 (en el barrio del Raval). Se presentaba como un "Periodich Desenal, Artístich, Literari y Científich", que salía los días 10, 20 y 30 de cada mes; y su suscripción costaba 6 reales al mes, 18 al trimestre, 32 al semestre y 60 al año. Se redactó en gramática prefabriana; y se postuló como la principal competencia de La Ilustración Española y Americana (fundada en 1870 en Madrid), a la cual desplazaría en las preferencias de los catalanes.

La Il·lustració Catalana rápidamente se convirtió en uno de los medios de prensa más leídos de Catalunya. Según Lluís Bertran i Pijoan —uno de los periodistas más prestigiosos de la época—, "La Il·lustració Catalana fue un hito del proceso de reconstrucción nacional de Catalunya". Durante aquella primera etapa, dirigida por Sanpons, La Il·lustració contó con la colaboración de los escritores más prestigiosos del momento: Valentí Almirall, Àngel Guimerà, Narcís Oller; Jacint Verdaguer; o el escritor provenzal creador del movimiento Felibrige (el renacimiento cultural occitano) Frederic Mistral. Durante la segunda etapa, dirigida por Francesc Matheu i Fornells, contó con la colaboración, también y entre otros, de Joan Maragall y Josep Carner.

Según el mismo Bertran i Pijoan (1930) "La Il·lustració Catalana manifestó siempre un ardiente catalanismo con el deseo de hacer solo catalanismo. La Il·lustració Catalana (...), huyó de polémicas políticas y filosóficas que reconocía que son provechosas cuando se podían sostener en el terreno de los principios, pero que muy a menudo eran origen de divisiones de trascendencia deplorable". Y añadía "En un país por hacer, por reconstruir, por vertebrar, el compromiso político de la prensa en la empresa catalanista es una constante en todo el pensamiento periodístico catalán". La Il·lustració Catalana estuvo presente en la vida cultural catalana durante 37 años. En diciembre de 1917, a causa de la crisis económica provocada por la I Guerra Mundial, desapareció después de publicar 759 números.