Por octavo año consecutivo, TV3 ha obtenido el liderazgo anual de una cadena televisiva en Catalunya. Y lo ha logrado en unas condiciones nada fáciles: sometida a un descrédito permanente de sus profesionales por una parte importante de los partidos unionistas, en particular de Ciudadanos y del Partido Popular. Trabajar en estas condiciones, que en parte también afectan a Catalunya Ràdio y de manera muy especial a la directora y conductora del programa matinal, Mònica Terribas, no es una aventura fácil. Acaba convirtiéndose en un trabajo de alto riesgo, ya que el poder político intenta desde la distancia decidir sobre titulares, minutaje y enfoques informativos a lomos del artículo 155. Ese cajón de sastre que sirve para todo lo que sea laminar la autonomía catalana.

Como TV3 es demasiado importante —13% de share anual— y no puede hacerse como en València, donde el PP cerró la televisión autonómica de un día para otro, el gobierno español ha adoptado una táctica igual de mortífera pero más a medio plazo. Ahogarla económicamente a través del Ministerio de Hacienda de Cristóbal Montoro, que reclama 167 millones de euros por el IVA de las subvenciones de la Generalitat entre 2015 y 2017. Que se consiga el efecto sin que se note el cuidado.

¡A ver si así se consigue situar TV3 como una cadena residual en Catalunya! Lo cierto es que, aunque es difícil, nunca el gobierno español y los partidos unionistas habían puesto tanto esfuerzo en un medio de comunicación público. Si una parte de esta energía se empleara en TVE, quién sabe si el Consejo de Informativos dejaría de denunciar manipulaciones en los informativos de la cadena.

En estas fechas hemos sabido que, por ejemplo, en un momento televisivo tan importante como las campanadas de Fin de Año la televisión de Castilla y León ha conseguido un hito histórico: 0,0% de cuota de pantalla y cero espectadores a las 00.00 horas. No fue la única: la 7TV Región de Murcia prometía unas campanadas diferentes y obtuvieron un cero en todo: share y espectadores. ¿Y qué hizo TV3 a la misma hora? 40,5% de share.

¡Cómo no van a querer cerrarla!