Tras la victoria de Donald Trump en la presidencia de los Estados Unidos, Wall Street ha abierto en territorio mixto. Más concretamente, el Dow Jones, su principal indicador, se ha teñido de rojo a su salida pero rápidamente ha pasado de puntillas hasta alzarse con una subida alrededor del 0,47% que pocos minutos después ha virado a zonas de pérdidas, con una caída del 0,24%. En estos momentos, su valor se encuentra cercano a los 18.332 puntos del cierre de la jornada del martes.

Por su parte, el selectivo S&P 500 ha sumado un leve 0,03% en los cinco primeros minutos y tras una hora de sesión está bajando un 0,43%. A todo ello, el índice compuesto del mercado Nasdaq ha cedido un 0,36% situándose en los 5.175 puntos. Ante todo, impera la ligera volatilidad.  De esta forma, la bolsa estadounidense ha iniciado la sesión en sentido contrario a las bolsas europeas, que, tras la apertura de Wall Street, se han dejado un 1,56% en el caso del Ibex 35, del 0,1% para París y del 0,13% para Fráncfort. Londres, por su parte, se ha anotado un alza del 0,5%. 

Una "estructura de poder" contra Trump

Las acciones del gigante de telecomunicaciones AT&T Inc y el grupo de medios Time Warner Inc han caído en la contratación antes de la apertura por el temor a que Trump mantenga su promesa de impedir la fusión de las dos empresas, valorada en 85.000 millones de dólares. Trump, que había lanzado ataques furibundos contra los medios durante la agria campaña electoral, había dicho que la propuesta de AT&T para comprar la empresa propietaria de CNN y el estudio Warner Bros era un ejemplo de una "estructura de poder" orquestada contra él y los votantes.

"Es demasiada concentración de poder en las manos de demasiados pocos", dijo Trump durante un mitin el 22 de octubre. Las acciones de AT&T han caído un 1,2% y las de Time Warner un 3,1%. AT&T ha ofrecido 107,50 dólares por acción por Time Warner el mes pasado, en una operación que le permitiría adquirir contenido para atraer a un mayor número de espectadores online.