Las ventas de cava se han incrementado un 0,76% durante el 2015, y han superado los 244 millones de botellas gracias a la dinámica favorable de las exportaciones, que han crecido un 1,64% y que han permitido contrarrestar la bajada del 0,8% registrada en el mercado español por el “inesperado” frenazo del efecto Navidad, según el informe económico presentado por el Consell Regulador del Cava.
El director de Comunicación de Freixenet y presidente del Consell Regulador del Cava, Pedro Bonet, ha tildado de “satisfactorios” los resultados del 2015, ya que se han vendido casi dos millones de botellas más que el 2014, duplicando así el ritmo de crecimiento. Más concretamente, se han vendido un total de 157,2 millones de botellas de cava de las cuales 114 millones (+2,15%) han sido destinadas a la Unión Europea, mientras que 43,2 millones (+0,33%) se han comercializado en otros países. El sector del cava se convierte así en líder del ranking mundial de exportaciones de vino espumoso por método tradicional y también de los propios vinos espumosos.
No hablar de boicot
La nota negativa para el cava ha sido también la más próxima. Después de crecer más de un 7% en el 2014, el mercado español ha vendido 700.000 botellas menos este año a pesar del contexto de recuperación económica que se predica en el país. Contrario a cualquier polémica de boicot, Bonet ha asegurado que la caída ha sido generalizada en el territorio por culpa de “turbulencias externas” vividas por el país, en referencia a las elecciones que “frenan mucho los ánimos del consumidor.”
“En el sector ya no hablamos de boicot. Probablemente sigue habiendo y lo tenemos asumido, no consideramos que haya sido una nueva causa o un brote que haya influido”, ha manifestado Bonet. Sin embargo, el directivo ha remarcado que el descenso del mercado español ha cogido por sorpresa el sector, ya que hasta el mes de septiembre, coincidiendo con las elecciones catalanas, las ventas estaban creciendo considerablemente y todo hacía presagiar que el 2015 sería “un año fantástico”.
Dentro de la hegemonía del mercado europeo, Alemania sigue siendo el comprador más importante de cava con 33 millones de botellas (+8,29%), seguido por Bélgica con 30,1 millones (-0,87%) y el Reino Unido con 27,9 millones (-3,23%). Conviene enfatizar también los 7,4 millones de unidades (+16,74%) de Francia, mundialmente conocida por su pasión por los champanes. Más allá del marco europeo, las expediciones de espumoso se han dirigido en el mercado estadounidense con 19,7 millones de botellas (+8,6%) y al Japón con 7,8 millones de unidades (+2,14%).
Un gran producto
Durante el acto de presentación de resultados, el subdirector general de Qualitat Diferenciada i Agricultura Ecològica del Govern, Rafael Eloy Bolívar, ha querido felicitar el sector “por colocar en el mercado más de 240 millones de botellas”, y ha considerado que es “todo un mérito y un éxito”. Al mismo tiempo, el director del Instituto catalán de la Viña y el Vino, Salvador Puig, ha remarcado que Catalunya “tiene un gran producto” que se está convirtiendo en todo un símbolo por todo el mundo.