Ryanair tiene la previsión de no elevar mayoría de sus aviones en Europa en los próximos diez días, según ha explicado la compañía aérea en un comunicado este lunes. Para mitigar los efectos de la pandemia del coronavirus, además, ha anunciado un periodo de despidos temporales. La compañía ya admitió ayer una reducción "sustancial" de las reservas en los últimos 15 días, y prevé que eso siga en el futuro.

Para los meses de abril y en mayo, la aerolínea espera reducir su capacidad de asientos hasta el 80%, y admite que no puede descartar que no vuele ninguno de sus aviones. En este contexto, avisa que congelará contrataciones y gastos, ofrecerá bajas voluntarias y también podría hacer suspensiones temporales de trabajo, además de reducir "significativamente" las horas de trabajo y los pagos.

Según Ryanair, ahora es "imposible" determinar cuándo podrían durar las restricciones. La aerolínea dice que tiene una fuerte liquidez, con 4.000 MEUR en marzo, que le tendría que permitir "sobrevivir" un periodo largo sin vuelos. Por ahora, Ryanair asegura que se centra en operar vuelos para "repatriar clientes, donde sea posible", para no dejar turistas en países que no eran los suyos.

En los últimos 7 días ha habido restricciones de vuelos –ya esté para no ir en ciertos países como por cierre de fronteras o aislamiento por el Covid-19- en Italia, Malta, Hungría, la República Checa, Eslovaquia, Austria, Grecia, Marruecos, España, Portugal, Dinamarca, Polonia, Noruega y Chipre. En Polonia y Noruega, por ejemplo, se han prohibido todos los vuelos internacionales.