Ryanair ha tomado una decisión en firme más allá de su vecindario. Tras la victoria del Brexit del pasado 23J, los nuevos aviones de la low cost irlandesa tendrán su base operativa fuera del Reino Unido. Y es que según ha comunicado el consejero delegado, Michael O'Leary, hay "mucha más certidumbre política en la Europa continental". El Brexit no cuenta ni mucho menos con el apoyo del directivo que se ha atrevido a tildar los políticos partidarios del divorcio británico con la Unión Europea (UE) como "pollos sin cabeza que no saben por lo que han votado y no tienen ni idea de dónde van a terminar". 

"Estamos siendo muy cautos sobre la capacidad que vamos a asignar al Reino Unido en los próximos dos o tres años hasta que tengamos alguna indicación de cómo quedará el Brexit." En este sentido, la aerolínea irlandesa que cuenta con una cuota de mercado del 18% en el Reino Unido tiene previsto bajar el ritmo de crecimiento del 15% actual hasta el 6% en el ejercicio 2017-2018. 

Certidumbre sin enfado

O'Leary prefiere ser prudente, no por un "enfado" sino por "certidumbre" ya que considera que "la decisión del Brexit está costando empleos reales, se están perdiendo visitantes reales y se están posponiendo inversiones reales." Todo ello, acompañado por una libra más débil y una fuerte presión a la baja sobre las tarifas que han caído entre un 10% y un 12%, añade O'Leary. Almenos, hasta 2017 ya que todavía es pronto para prever las repercusiones en el negocio de las aerolíneas a largo plazo. 

En cualquier caso, la estrategia de Ryanair ya está siendo redirigida. Por un lado, el directivo irlandés ha precisado que a lo largo de este mismo invierno "se va a recortar capacidad y frecuencia en las rutas de Londres-Stanstead, donde ya estamos muy por delante de nuestros objetivos de crecimiento del tráfico en varios años." Una estación a partir de la cuál se contará con cuatro nuevas rutas desde Glasgow a Barcelona, Valencia, Lisboa, Palanga y Zadar. Además de otras cinco nuevas rutas desde Edimburgo a Barcelona, Ibiza, Milán, Oporto y Vigo. 

Y en lo que a la expansión del próximo año se refiere, cautela y más cautela. Cabe recordar que la aerolínea que logró un beneficio de 256 millones de euros en su primer trimestre fiscal, lo que supone un 4% más, prevé superar los 180 millones de pasajeros anuales en el 2024.