A pesar del contexto francamente adverso y lleno de incertidumbre, la economía española sigue haciendo su camino para recuperar plenamente la actividad perdida a raíz de la pandemia de la covid. En este segundo trimestre de 2022, siguiendo esta idea, la economía del Estado aceleró su crecimiento trimestral hasta situarlo en el 1,1%, enfrente del 0,2% del trimestre anterior, según el avance de datos de Contabilidad Nacional publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De hecho, en este segundo cuarto del año ha sido la demanda nacional quien ha liderado el crecimiento económico, principalmente gracias a la fuerte recuperación del consumo de los hogares, que ha crecido un 3,2%, y el mantenimiento del dinamismo de las inversiones. En términos interanuales, la variación del producto interior bruto es del 6,3%, tasa similar a la del primer trimestre de 2022, según apunta el INE.

Gracias a este nuevo crecimiento del PIB, que ya el quinto consecutivo, la economía española se ha situado siete décimas por encima del previsto por el Banco de España, que había proyectado en sus últimas previsiones un avance del 0,4% para el segundo trimestre. No obstante, el INE ha explicado que el avance de datos de este segundo trimestre se ha realizado a partir de indicadores estadísticos que ofrecían resultados hasta mayo. Ahora bien, como ya ocurriera en el avance de resultados de anteriores trimestres, el INE también ha podido añadir en esta ocasión, a la información de base habitualmente empleada, resultados avanzados de algunas fuentes referidos en el mes de junio estimaciones de indicadores basados en datos administrativos y otras fuentes adicionales que complementan a las usuales, todo eso en línea con las recomendaciones de Eurostat y otros organismos estadísticos internacionales.

Uno de los factores que más han ayudado a este aumento del PIB han sido las exportaciones de bienes y servicios que han crecido un 18,5% con respecto al segundo trimestre de 2021, lo cual supone cuatro décimas más que en el trimestre anterior. Esta aceleración se produce por un incremento en las tasas interanuales de las exportaciones de bienes (del 0,4% al 0,5%) compensada, en parte, con la disminución en la tasa de las exportaciones de servicios (del 90,1% al 86,5%). Dentro de estas, el gasto de no residentes en el territorio económico disminuye 320,3 puntos (del 728,7% al 408,4%). Por la parte de las importaciones, estas un 10,4% con respecto al mismo trimestre del año anterior, 1,3 puntos menos que en el primer trimestre. Esta desaceleración se explica por la disminución en las importaciones de bienes (del 9,5% al 6,8%) mientras se produce un incremento en la tasa de variación interanual de las importaciones de servicios (del 24,5% al 29,9%). Por su parte, el gasto de residentes en el resto del mundo modera 12,4 puntos su variación interanual este trimestre (del 116,2% al 103,8%).