Que Ada Colau no es santo de la devoción de gran parte del empresariado barcelonés no es ningún secreto, y más todavía después de las quejas por las nuevas restricciones a la movilidad en Barcelona. Es en este contexto que la patronal Foment del Treball ha organizado un acto reivindicativo contra la alcaldesa de Barcelona, reclamando diálogo y la derogación de las nuevas normativas en materia de movilidad y comercio. Una ofensiva que ha abarcado los discursos de varios sectores empresariales y las duras palabras del presidente de la patronal, Josep Sánchez Llibre, quien ha criticado la política de la alcaldesa.

En este sentido, Sánchez Llibre se ha dirigido directamente a Colau: "Alcaldesa, lo bastante de hacer daño a la ciudad de Barcelona, bastante de maltratar a los barceloneses. Usted está ahogando su vitalidad con sus obsesiones sectarias e ideológicas".

 

Contra la política de movilidad de Colau

El presidente de Foment ha asegurado que el plan de movilidad del consistorio afectará negativamente a la economía y pondrá en juego más de 50.000 puestos de trabajo, por lo que ha instado a revertir las medidas adoptadas hasta el momento. "Los empresarios de Foment somos los primeros que queremos promover a los modelos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente", ha aseverado antes de matizar que, por eso, se predisponen a negociar con "diálogo y consenso y lamentan profundamente" que Colau no los haya atendido.

"No es de recibo que quien predica la participación y el diálogo no quiera reunirse con los principales sectores económicos y generadores de empleo en Barcelona", ha remarcado. Según Sánchez Llibre, "los cambios en las políticas de movilidad requieren de consenso con los colectivos afectados", así como "alternativas e infraestructuras adecuadas y compromisos a tres años vista", condiciones que, ha dicho, "no se observan en las medidas de Colau".

"Han sido hechas de espalda en los sectores económicos, con nocturnidad, unilateralidad e inmediatez", ha reiterado para acusarla de tomar decisiones "sectarias e ideológicas" y "maltratar a los barceloneses" al "criminalizar el vehículo privado de forma indiscriminada".

Los hoteleros y la automoción, enfadados

El sector del turismo y el de la movilidad también han mostrado su enfado con la alcaldesa. El presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Mestre, también ha culpado a Colau de "no escuchar los sectores implicados con iniciativas son un contrasentido".

"Todo el mundo dice que queremos apostar por un turismo de calidad pero que el taxi o transfer de un turista de congreso lo deje dos o tres islas más allá del hotel no lo entenderá nadie", ha subrayado. "Si tuviéramos un transporte público como Dios manda se podría arreglar, pero no es el caso".

También el presidente del Gremio del Motor y Fecavem, Jaume Roura, se ha mostrado muy crítico con la gestión municipal de los comunes, a quien ha reprochado que "impulse medidas contra el coche y la moto de una manera indiscriminada y poco respetuosa".

"Ni un dedo" para Nissan

Roura también ha querido centrarse en la pérdida de Nissan, y ha criticado el papel de la alcaldesa en este tema, aseverando que Colau "no ha movido ni un dedo para defender la permanencia de las plantas de Nissan" después del anuncio de la multinacional japonesa del cierre de actividad en Catalunya.

"Nos preocupa mucho y no sólo a nosotros. También a empresas y trabajadores. Queremos que la movilidad sea transversal, participativa, variable y respetuosa," ha concluido.