El número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre viviendas en Catalunya se situó en 6.956 expedientes en 2016, cosa que supone un descenso del 37,39% en relación con el número registrado en el 2015, según ha publicado este lunes el Instituto de Estadística español (INE).

Las ejecuciones sobre viviendas nuevas cayeron en el mismo periodo el 34,82% mientras que las ejecuciones inscritas sobre viviendas de segunda mano lo hicieron en un 37,57%. En el conjunto del Estado español, el número de ejecuciones iniciadas sobre viviendas en el 2016 cayeron el 30,9%.

La mejora de la coyuntura de la economía tiene un impacto directo en el registro del número de ejecuciones hipotecarias sobre fincas y viviendas en particular.

Así, en el cuarto trimestre, en Catalunya el número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre viviendas se situó en 1.329 expedientes, cosa que supuso un descenso del 42,42% en relación con el cuarto trimestre del 2015.

El resto de España

En el resto del Estado, las cifras se han situado en 21.064, cifra un 30,9% inferior a la del 2015, según el propio INE.

De esta manera, las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales encadenan dos años de retrocesos después de que en el 2015 bajaran un 12,6%. Sólo en el cuarto trimestre del 2016 se registraron 4.630 ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales, un 18,1% más que en el trimestre anterior, pero un 33,2% menos que en el cuarto trimestre del 2015.

El objetivo principal de esta estadística es ofrecer trimestralmente el número de certificaciones de ejecuciones hipotecarias iniciadas e inscritas en los Registros de la Propiedad durante el trimestre de referencia. Estadística recuerda que no todas las ejecuciones de hipoteca acaban con el lanzamiento (desahucio) de sus propietarios.

En el 2016 se iniciaron 72.941 ejecuciones hipotecarias, un 28,8% menos que en el 2015. De estas, 69.211 afectaron a fincas urbanas (donde se incluyen las viviendas) y 3.730 en fincas rústicas.

Las ejecuciones hipotecarias sobre fincas urbanas disminuyeron un 28,8% en relación en el 2015. Dentro de las fincas urbanas, 41.129 ejecuciones correspondieron en viviendas, un 31,5% menos, y de estas 26.954 eran ejecuciones sobre viviendas de personas físicas, un 31,2% menos.