Si el Consejo Europeo da su beneplácito, España se librará de la multa de Bruselas por incumplimiento del objetivo de déficit en 2015. . La Comisión Europea ha cancelado la sanción, tal y como quería el Gobierno en funciones de Mariano Rajoy, que podría haber llegado hasta el 0,2% del Producto Interior Bruto (PIB) por defecto, es decir, más de 2.000 millones de euros.

Las cosas no son tan bonitas como parecen a simple vista. La CE ha establecido nuevas condiciones con objetivos del 4,6% del PIB para este año, el 3,1% en 2017 y el 2.2% en 2018. Paralelamente, pedirá un presupuesto austero para el año que viene, con un recorte estructural de 5.000 de euros y vigilará trimestralmente sus cuentas públicas. 

En este sentido y a pesar de que España ha realizado "enormes sacrificios" en los últimos años, todavía tendrá que hacer muchos más en los "dos años más de margen" que se le han concedido. Y es que según el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, España tendrá que hacer "grandes reformas estructurales" para conseguir reducir el déficit por debajo del 3% del PIB. Y por lo que respecta a la congelación de fondos europeos, el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, ha explicado que "la decisión se tendrá que debatir con el Parlamento Europeo."

División hasta el último momento

Los comisarios se han mantenido divididos hasta el último minuto sobre la posibilidad de dejar en cero la multa o imponer al menos una multa simbólica, tal y como pedían los partidarios del ala dura del Ejecutivo comunitario entre ellos los vicepresidentes de Crecimiento e Inversión, Jyrki Katainen, y el mismo Dombrovskis.

La propuesta de multa a España quedará automáticamente aprobada salvo que una mayoría cualificada de países rechace la recomendación de la Comisión en un plazo de diez días.

El Gobierno español en funciones lleva semanas dando por hecho que la multa sería "nula o cero", como ha dicho en reiteradas ocasiones el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos. El sentido común dice que no va a haber multa para España", aseguró el titular de Economía en funciones, que insistió en que contaba con el apoyo de sus homólogos alemán, francés e italiano en este sentido.